En la tarde de este jueves continuó la audiencia judicial respecto de los graves disturbios ocurridos en el barrio Esperanza de Mercedes, que incluyó el incendio de dos viviendas, habiendo resuelto en la madrugada de este jueves el Dr. Marcelo Souto el inicio de proceso infraccional a tres adolescentes de 13, 14, y 15 años, dos de ellos hermanos de sangre y el otro de crianza, que se suman a un hermano mayor proceso con prisión por lesiones personales y que fue el origen de los desmanes posteriores.
De acuerdo a fuentes judiciales, faltaron pruebas para procesar a la madre de estos niños porque «los testigos no dijeron todo lo que vieron».
A nivel judicial hay convicción que «todos vieron lo que pasó», pero como también expresaron a la Policía varios testigos, «tienen miedo de decir lo que vieron, algunos inclusive están amenazados».
La decisión del Dr. Souto ante la falta de testimonios de los testigos fue de dejar en libertad bajo emplazamiento a la madre y a las otras dos personas que estaban detenidas se les dejó en libertad ya que deslindaron responsabilidades en los hechos.
«Esto recién empieza» dijeron fuentes judiciales para el caso de la madre, «se confía en que los testigos digan lo que vieron, se aporten nuevas pruebas para poder adoptar una resolución».
Paralelamente sabemos que hay autoridades a distintos niveles que están sumamente preocupadas por esta situación, ya que son concientes que de quedar todo sí, será tomado como un triunfo por quienes promueven este tipo de hechos, asumiendo que las amenazas surten efecto y hace que los vecinos no digan lo que ven, lo que es algo muy grave. Para la Justicia, se trata de delitos complejos de probar si no se tiene el respaldo de las declaraciones de quienes presencian los hechos.
«Por ahora quedó en libertad...» señalaron las fuentes judiciales consultadas.
Un tema para analizar como sociedad porque la delincuencia sigue ganando terreno...
En la fotografía el Dr. Marcelo Souto se retira de la sede judicial este jueves, acompañado de la Fiscal Dra. Gabriela Yanieri.