
La ministra de Industria, Energía y Minería, Fernanda Cardona, informó sobre los ajustes en los precios de los combustibles correspondientes a los meses de julio y agosto dispuestos por decreto, en base a la nueva metodología.
El precio de las naftas se incrementa en 0,25 pesos y el gasoil en 1 peso, mientras que el supergás baja 100 pesos por garrafa de 13 kilos. Esta reducción se adiciona al subsidio del 50 % que tiene la población con tarjeta Uruguay Social y el programa Asistencia a la Vejez.
La secretaria de Estado informó que es una decisión que alcanzará a más de un millón de hogares y que responde al esfuerzo del Gobierno por los intensos fríos que se vienen atravesando. “Tiene que ver con ir gestionando y considerando el bolsillo de la gente, como dijo el presidente”, agregó.
Cardona lo entiende como una decisión general para la ciudadanía, no solo como un beneficio para las personas de bajos recursos, sino también para la clase media “que hace un gran esfuerzo”. Recordó que más del 80 % de los hogares utiliza el supergás para cocción y son muchos quienes lo usan para calefacción.
En el caso de la suba de las naftas y el gasoil, explicó que se está trasladando el precio de paridad de importación (PPI), teniendo en cuenta la compleja realidad internacional.
Importancia de Ancap en contexto de volatilidad
En este contexto, Cardona aclaró que tener a Ancap y a la refinería de La Teja permite tomar decisiones que no contemplen de inmediato la realidad mundial y recordó que la empresa estatal tiene un stock establecido de petróleo que va refinando.
Tener una refinería nacional, dijo, le evita al país comprar derivados de petróleo, lo que es importante en un contexto de gran volatilidad de los precios internacionales.
Energía eléctrica y cambio de la matriz
En cuando al consumo de energía eléctrica, Cardona indicó que si bien no se registró mucho viento en las últimas semanas, los picos de consumo de energía eléctrica no se dan en invierno, sino en verano.
Relató que, cuando se transformó la matriz eléctrica, se intentó dar un pool de oportunidades, por lo que Uruguay se abastece con diferentes fuentes. Esto permite recurrir en forma mayoritaria a renovables, lo que impacta en forma favorable a nivel económico y ambiental.