
Este grupo que inició sus actividades en el año 2000, y que ha recreado el cruce de los valientes hombres comandados por Juan Antonio Lavalleja, hizo confeccionar dos réplicas exactas del histórico pabellón enarbolado en 1825 en la playa de la Agraciada tras el desembarco.
La comisión dispuso que las dos banderas que les han acompañado en los cuatro cruces realizados (2000, 2005, 2010 y 2025), queden en custodia en los lugares de gran significado histórico para la gesta de 1825.
Tal es así que una de ellas quedó en el museo de Beccar Varela, perteneciente a la municipalidad de San Isidro, localidad de la provincia de Buenos Aires desde donde partieron los “33 Orientales”.
En tanto, la otra bandera será donada a la Intendencia de Soriano, que la tendrá en custodia, poniéndola en exhibición durante las distintas celebraciones por el Bicentenario de la “Cruzada Libertadora”.
Ambas enseñas tienen un altísimo significado histórico y patrimonial, son exactamente iguales a las originales confeccionadas en 1825 en la tienda y ropería de Luis Ceferino de la Torre en Buenos Aires; pero además son las únicas banderas que han estado en todos los sitios donde flamearon las de 1825, incluyendo el cruce desde San Isidro hasta playa de la Agraciada.
Respecto a las originales, una fue robada del Museo “Casa de Lavalleja” el 16 de julio de 1969, mientras que tres fragmentos de la otra fueron donados al Museo Histórico Nacional por Juan Spikerman en 1858.
En el caso de Soriano, las banderas, tanto las originales como las actuales réplicas; han flameado en la Agraciada, en San Salvador (Dolores), Villa Soriano y Monzón.