
Este domingo y tras la jornada inaugural en el escenario principal en Manzana 20 desarrollada este sábado en la noche y sobre lo cual @gesor informó en notas anteriores, este domingo a partir de las 19.00 horas comenzaron los toques callejeros en los cuales músicos de diferentes nacionalidades, varios de ellos que no tienen la posibilidad de tocar en el escenario principal, otros que sí, la gran mayoría que recién se conocen en el momento en que se van a inscribir en Manzana 20 previo a juntarse para tocar, se iniciaron estos toques que desparraman música por el barrio el Puerto de Mercedes.
Como en años anteriores se ubicaron entres lugares estratégicos de la zona, uno por calle 19 de Abril entre Detomasi y Leandro Gómez; otro en Leandro Gómez entre 19 de Abril y Cassinoni y el restante en Cassinoni entre Leandro Gómez y Detomasi.
Como forma de dar inicio a los toques callejeros, una pequeña banda conformada por diferentes instrumentos, algunos integrantes de la organización y músicos de la Escuela de Jazz a la Calle, hicieron el recorrido abarcando los tres toques, como dando el aval con la música que llevaban para que se iniciara el toque en cada una de las ubicaciones que ya estaban prontos los distintos grupos que se habían armado.
El público fue lleganado, en su gran mayoría con la silla playera, otras personas directamente a sentarse en el cordón de la vereda y otros se sentaban en el propio pavimento cruzando las piernas como también es habitual, con los grupos instalados en medio de las calles mencionadas.
El sonido mágico de los instrumentos que fue reuniendo a la gente a medida que el sol bajaba, y hasta pasadas las 20.15 la música se adueñó de las calles del barrio del Puerto mercedario, los vecinos siempre dispuestos a dar una mano, algunos con sus casa decoradas para la ocasión y nuevamente, como todos los años, las imágenes se repitieron.
Acostumbramos a decir que en esa zona la ciudad es otra, en tiempos de tanta crispación, de tanto enfrentamiento, de falta de comprensión y respeto por el otro, allí en esa calles se respira música, pero también precisamente respeto por el otro, no importa la edad, desde los más pequeños gateando o empezando a caminar, hasta el abuelo o la abuela, desde los gurises que correr y juegan y por momentos quedan absortos ante los músicos mirándolos tocar, hasta quienes se concentran en las diferentes melodias y notas musicales que brotan de cada uno de los instrumentos, a medida que la calidad interpretativa de los músicos las van generando fuera de toda partitura pero a la generando una única e irrepetible.
Los toques tienen eso, que te permiten escuchar música, disfrutar de ella, pero a la vez convivir con vecinos que conocés de otras instancias, con gente que nunca viste, pero en definitiva nos devuelve esa sana convivencia en la que todos cuidamos nuestro espacio y el del otro, pero a la vez es el mismo, y en ese respeto recíproco, generamos valores que a veces parecen olvidados, pero que esto nos demuestra que están ahí nomás y que no precisamos que nadie obligue a respetarlos, sino que en este caso el pretexto de la música y el ambiente que se genera, nos los hace aflorar.
Benvenidos toques callejeros, a disfrutar gente!!!