A las 19.33, se reportó un disturbio en la cancha parque Bristol, donde se estaban llevando a cabo actividades de fútbol. La situación se generó tras la finalización del partido entre los equipos locales, lo que llevó a la intervención de las autoridades.
Los funcionarios policiales en el lugar solicitaron apoyo ante el aumento de la tensión, lo que llevó a la llegada de varios móviles policiales para controlar la situación.
El delegado del Club Racing fue quien alertó a la policía, informando sobre la violencia que se estaba generando, donde se arrojaban piedras hacia los vestuarios.
Un testigo del evento también corroboró que se lanzaban piedras desde el exterior, causando preocupación entre los presentes.
El canchero de la instalación confirmó la aglomeración de personas y constató daños visibles, incluyendo una puerta lateral de ingreso a los vestuarios que quedó torcida y vidrios rotos esparcidos por el suelo.
Personal de Policía Científica llegó al lugar para realizar un relevamiento fotográfico de los daños. Las autoridades continuarán las investigaciones con el objetivo de identificar a los responsables del disturbio y los daños ocasionados en las instalaciones de la cancha.