(escribe Sergio Pérez ) El pasado miércoles 9 de octubre, en el marco de la 46ª Edición de la Feria del Libro de Montevideo, se presentó la décima edición del libro "Martín Aquino: El Matrero", escrito por los reconocidos autores Walter “Serrano” Abella y Javier Vaz. La ceremonia tuvo lugar en la sala "Ernesto de los Campos" de la Intendencia de Montevideo, que estuvo colmada de público ávido de cultura e historia empecinadamente nacional.

Entre las figuras destacadas del evento, se contó con la presencia de la Directora de Cultura de la Intendencia de Montevideo, María Inés Obaldía, hija del notable escritor José María Obaldía, y el referente literario Mario Delgado Aparaín. En un toque artístico, los músicos del dúo Copla Alta y Larbanois Carrero deleitaron a los presentes con interpretaciones magistrales, culminando con una conmovedora versión de "El Matrero", compuesta por el maestro Ruben Lena, quien inmortalizó la figura de Martín Aquino. Otras de las personalidades presentes en el público fue Juan Martín de Posadas y Schubert Flores Vasella. 

Sin embargo, el momento más emotivo de la velada fue el homenaje a Pepe Guerra, amigo cercano de Serrano Abella y un ícono de la música popular uruguaya. Un video proyectado al inicio de la presentación recordó los momentos compartidos entre Guerra y músicos, interpretando la canción “Los Amigos” de José Carbajal “El Sabalero”.

El libro "Martín Aquino: El Matrero", publicado por Editorial Fin de Siglo, ya ha vendido más de 12.000 ejemplares y ha recibido múltiples distinciones literarias, lo que lo consolida como una obra imprescindible para conocer la historia rural uruguaya. Con 400 páginas de relatos cautivadores, la obra narra la vida de Martín Aquino, un hombre que desafió la ley y, según el autor, "la muerte con una dignidad brutal".

El acto comenzó con las palabras de la Directora de Cultura de la Intendencia de Montevideo, María Inés Obaldía comenzó agradeciendo a la editorial por permitirle formar parte de este evento. Compartió un emotivo relato personal sobre su padre, quien a sus 99 años aún no asume la muerte de Pepe Guerra, lo que la llevó a reflexionar sobre el impacto que la música de Guerra y las figuras como Martín Aquino han tenido en su vida y en la memoria colectiva uruguaya. Recordó cómo su familia conoció a Serrano Abella desde joven, cuando recitaba en el carnaval de Treinta y Tres, destacando su talento desde temprano.

Obaldía también habló de su admiración por el espíritu libertario de Serrano Abella, quien con su trabajo en los medios y su conexión con la tradición oral ha logrado mantener vivo el legado de figuras históricas como Martín Aquino. Para ella, el valor de personajes como Aquino radica en su resistencia y en cómo su vida, marcada por la adversidad, se entrelaza con la lucha por la libertad en la cultura popular uruguaya.

Finalmente, resaltó la importancia de rescatar historias de personajes femeninos olvidados, como una mujer encarcelada injustamente, y cómo el espíritu rebelde de figuras como Martín Aquino sigue siendo una fuente de inspiración. Concluyó agradeciendo el trabajo de los autores por convertir la memoria oral en un legado tangible a través de la investigación y la publicación de este libro, asegurando que el espíritu libertario de Uruguay se mantendrá encendido.

Por su parte, el co – autor del libro, el Dr. Javier Vaz, explicó que el libro intenta capturar la historia más fiel posible de Martín Aquino, reflejando tanto sus luces como sus sombras. Aclaró que Aquino se convirtió en una figura legendaria a pesar de que su vida pública abarcó apenas unos pocos años, marcados por su conflicto con la ley y su promesa de nunca volver a ser encarcelado. También mencionó que la investigación buscó preservar la tradición oral que rodea a Aquino, incorporando la poesía y los relatos populares que se han tejido alrededor de su figura a lo largo del tiempo.

Finalmente, Vaz comentó que el libro contiene elementos novelados, especialmente en aquellos aspectos de la vida de Aquino de los que no se dispone de mucha información, como su infancia y su relación con el contrabando. Expresó su satisfacción con el resultado literario de estas adiciones ficcionales, señalando que ayudan a pintar una imagen más completa de este personaje. Agradeció a la Intendencia de Montevideo, a los organizadores de la Feria del Libro y a la editorial Fin de Siglo por el apoyo, y celebró los 15 años de la publicación de esta obra fundamental para la cultura uruguaya.

El escritorio Mario Delgado Aparaín, quien fue uno de los invitados como interlocutores de esta presentación, comenzó compartiendo su especial fascinación por los matreros, reflejando su crianza en el campo y sus experiencias de juventud. Recordó a figuras como Simón Roldán, un hombre albergado por su familia, cuya identidad verdadera se mantuvo en secreto durante años. También habló sobre su descubrimiento del sepulcro de Martín Aquino en un cementerio mientras acompañaba a su tía Silvana, quien le transmitió historias de la vida rural y la importancia de personajes como Aquino en la cultura popular.

Delgado Aparaín reflexionó sobre el contexto social en el que vivió Martín Aquino, un periodo marcado por el alambramiento de los campos y la exclusión de los gauchos y sus familias. Según él, Aquino nació en un mundo de supervivencia y resistencia, donde se convirtió en una figura venerada por su habilidad para esquivar a la autoridad y por su espíritu libertario. Subrayó que aunque Aquino no fue un delincuente, fue perseguido y encarcelado, lo que lo llevó a ser inmortalizado como leyenda en la cultura rural uruguaya.

Destacó cómo la leyenda de Martín Aquino fue mantenida viva a través de la tradición oral y las artes, desde la poesía hasta el cine y el teatro. Resaltó la importancia de la literatura como un acto de resistencia contra el olvido y la alienación, afirmando que libros como Martín Aquino: El Matrero cumplen un papel vital en el rescate de la identidad y la memoria colectiva. Concluyó mencionando que esta decimoquinta edición es una obra de resistencia que permitirá a los lectores disfrutar y preservar la historia de este icónico personaje.

UNA HISTORIA DE DIGNIDAD Y RESISTENCIA

Walter Serrano Abella, durante su intervención en la presentación del libro, compartió detalles íntimos de la historia de Martín Aquino, relatando el momento en que fue rodeado por 16 policías la madrugada del 5 de marzo de 1917. Según Abella, Aquino, consciente de que su final estaba cerca, salió de su refugio gritando: "¡Acá está Martín Aquino, carajo!", desafiando a la muerte con el único equipaje de su dignidad.

Este acto no solo marcó el fin de la vida de Aquino, sino que lo inmortalizó como un símbolo de resistencia en el Uruguay rural. A través de entrevistas y documentos recogidos por Abella y Vaz, la obra reconstruye cómo Aquino, acompañado por otros personajes históricos, enfrentó las injusticias de un sistema que intentaba reprimir su libertad.

Abella relató cómo Aquino, incluso en sus últimos momentos, mantenía una serenidad extraordinaria, enfrentando a los policías que lo perseguían. Los relatos de los testigos indican que Aquino avanzaba hacia ellos desarmado, y algunos oficiales confesaron más tarde que "merecía una muerte de hombre". Este tipo de detalles, sumados a una exhaustiva investigación, hacen de "Martín Aquino: El Matrero" una lectura obligada para quienes buscan comprender la compleja historia de los matreros en Uruguay.

MARTÍN AQUINO: MÁS ALLÁ DE LA LEY

Aquino, conocido por su íntimo conocimiento de los montes de Santa Lucía y del Río Negro, logró escapar varias veces de las fuerzas policiales, lo que consolidó su reputación como el último matrero del país. Abella enfatiza que la historia de Aquino no es solo la de un fuera de la ley, sino la de un hombre que luchó por su libertad, incluso a costa de su vida.

A lo largo de la presentación, el autor compartió anécdotas recogidas en grabaciones de personas que conocieron a Aquino o que escucharon relatos transmitidos de generación en generación. Entre estos testimonios, se destacan aquellos que recuerdan cómo Aquino, tras haber sido rodeado por la policía, logró mantenerse en pie, resistiendo hasta el último momento. Estos relatos, a menudo contados en las noches de fogón, han alimentado el mito y la leyenda de un hombre que nunca se rindió.

UN LEGADO DE LIBERTAD Y CORAJE

Para Abella, el legado de Martín Aquino va más allá de su resistencia a la autoridad. Su historia representa la lucha por la libertad y el coraje, valores que, según el autor, "todavía resuenan con fuerza en el Uruguay profundo, especialmente en el campo". Aquino, que creció sin conocer a su padre y sin acceso a la educación formal, encontró en los caballos y en la vida del contrabando un medio para sobrevivir y prosperar.

El autor destaca que Aquino nunca se alineó con ningún partido político; era un hombre que vivía al margen de las convenciones sociales, guiado por un único principio: la libertad. Su vida, marcada por enfrentamientos con la ley y huidas por los montes, se convirtió en un símbolo de la resistencia ante la opresión.

UN HÉROE RURAL

"Martín Aquino: El Matrero" no solo ofrece una perspectiva histórica detallada de los eventos que rodearon la vida de Aquino, sino que también invita a reflexionar sobre la figura del matrero como un héroe rural. A través de un lenguaje fluido y accesible, Walter Serrano Abella y Javier Vaz logran transmitir el espíritu de un Uruguay que ya no existe, pero cuyo legado persiste en la memoria colectiva.

Aquino no solo desafiaba a la ley; desafiaba las normas de una sociedad que intentaba doblegar su voluntad. Y aunque su vida terminó de manera trágica, su legado sigue vivo en las páginas de este libro. En la parte final de su alocución, Serrano Abella no encontró mejor manera de describir a Martín Aquino que a través de la pluma de Serafín J. García, en su libro "Tacuruses", con los versos de su poema "Orejano":

"Y a mí que me importa, soy chúcaro y libre 
no sigo a caudillos ni en leyes me atraco. 
Y voy por los rumbos clareaos de mi antojo 
y a naides preciso pa´ ser mi baqueano!"

Una descripción que refleja a la perfección la esencia libre e indomable de Aquino, consolidando su figura como un símbolo de libertad en el Uruguay profundo.