En la segunda parte de la entrevista a Pablo Mieres, presidenciable del Partido Independiente, se refirió a otros temas del mundo del trabajo y de temas de la actualidad nacional.

¿Y para las personas adultas que opciones hay?
"Otro desafío que tenemos es la capacitación laboral para las personas adultas. Ahí nosotros tenemos un instrumento que es muy bueno, que es INEFOP, que promueve justamente los cursos que permiten que los trabajadores puedan tener opción a recalificarse, porque también es verdad que en este ritmo que tenemos de cambio el trabajo hay puestos de trabajo, roles ocupacionales, que van desapareciendo y la gente se queda sin habilidades para reengancharse en otros trabajos".

INEFOP, si vamos a la experiencia de gobiernos anteriores y en este que se ha corregido, pero algo, me refiero que muchas veces se transforma en un negocio para las llamadas escuelas, que en definitiva son las que dan las clases, y no van a los temas centrales.
Es decir, no vienen acá a Mercedes a analizar la necesidad laboral entonces ofrecen a la gente que tiene que inscribirse y hacer un curso de INEFOP algo que después no tiene ubicación en el mercado. ¿Cómo se corrige eso? Porque se está haciendo una inversión importante, hay mucha plata.
Y en definitiva, cuando uno pasa raya, la plata parece que termina ganándola los que dan las clases. La inserción laboral, ahí dejo para que explique si hay algún número.
"Yo creo que el sistema de selección de las entidades capacitadoras hay que seguir trabajando porque no está bien resuelto. Independientemente de eso, en este periodo de gobierno el INEFOP redefinió sus objetivos. Yo creo que corrigió una serie de criterios que se habían utilizado en el gobierno anterior que implicaban un nivel de gasto en cursos sin mucho fundamento.
Hay el foco central de INEFOP es capacitar en habilidades que son claramente parte del futuro del trabajo. Habilidades digitales que sí o sí en el mundo futuro van a estar requeridas. Y habilidades blandas, es decir, trabajo en equipo, iniciativa, puntualidad, asiduidad.
Esos dos han sido los focos en donde INEFOP se ha focalizado, valga la redundancia, en este periodo de gobierno. Y tenemos un nivel de capacitación de alrededor de 50.000 trabajadores por año. O sea que no han dado mal.
Yo creo que sigue habiendo un problema en los mecanismos de selección de las ECAS y de asignación de los cursos. Pero en los contenidos de los cursos se ha mejorado bastante y en los resultados de esos cursos, en el foco de esos cursos, se ha mejorado. Lo cual no quiere decir que el trabajo esté terminado.

¿Qué mensaje daría a la gente? Se habla de un cruce de caminos. Por lo general cuando llegan a 130 instancias electorales se vuelve a eso, pero parece que hoy se pone más acento en eso. Pero se pone acento en eso fundamentalmente en los políticos, porque, notarás, hombres de varias campañas, ya que esta campaña viene mucho más fría que otras. Y también ahí hay dos lecturas, es decir, hay un sector de la población que uno dice, este sector que está silencioso mejor dicho, parecería que podía definir la elección y que pudiera estar bien, conforme hasta ahora y que por ahí de repente no necesita manifestarse. Y eso enfría. O hay algún otro aspecto. 
"Yo creo que hay dos cosas ahí, capaz que hay más, pero por lo menos dos. Una, yo creo que Uruguay no es un país que hoy esté en una crisis que genera esa explosión social de participación, de reclamo, de movilizaciones, para nada.
Uruguay es un país que la está llevando siempre, problemas siempre hay, gente que no la pasa bien, lamentablemente, sigue habiendo, pero Uruguay es un país que, comparado con la región y con el mundo, es un país que tiene una estabilidad, un nivel de vida mejor que muchos otros países de la región, con, repito, problemas pendientes sin duda, y algunos de ellos yo recién lo mencionaba, el tema de la pobreza infantil, de la deserción educativa, del desempleo de los jóvenes, y hay muchos más. Y hay que trabajar en ellos para seguir mejorándolos. Pero yo creo que ahí está el punto, para seguir mejorándolos.
Y el énfasis está puesto en que este gobierno, a pesar de todas las dificultades que tuvo que enfrentar, logró encarar varios temas que habían quedado pendientes y que no se habían puesto arriba de la mesa para resolverlos, y la verdad, hemos avanzado. Y yo creo que lo mejor que le puede pasar a los uruguayos es que ese avance continúe con incorporación de nuevos desafíos, como los que recién mencionábamos, que son los que nosotros nos planteamos. Estoy convencido de que para los uruguayos eso es lo mejor, que continuemos por el camino de una coalición que tendrá sus nuevos perfiles, que tendrá un reequilibrio en su peso electoral y que eso es justamente lo que nosotros aspiramos, tener más peso como Partido Independiente, siento que puede ser un aporte mayor si tenemos más poder, más peso electoral, y a eso vamos, a tratar de lograr el resultado en la próxima elección, en ese sentido.
Y después la otra razón que habla de que de repente la gente está un poquito más retraída que es verdad, tiene que ver con que cambiaron las formas de relacionamiento social en estos años. Yo digo, la pandemia es un antes y un después, es decir, por ejemplo, hasta la pandemia la idea de que uno puede participar en una reunión sin estar, es decir, por Zoom, no existía. Nadie se le ocurría y la tecnología ya estaba, pero se usaba muy poco.
La proliferación de mecanismos de relacionamiento, grupos de discusión de WhatsApp, por ejemplo, no estaba, o tenía un nivel de desarrollo mucho menor. Hoy en día el ser humano ve, descubrió que puede estar informado, que puede participar, que puede pesar, opinar y hasta decidir. A veces cree que decide más de lo que decide por medio de mecanismos a distancia.
Entonces, esas actividades que tradicionalmente mostraban la efervescencia electoral, que eran los actos, las movilizaciones, las caravanas, todo eso ha pasado a un segundo plano, porque para el ciudadano, el ciudadano no necesita ir a un acto para estar escuchando el discurso, por ejemplo. No necesita ir a una reunión en una sede política para opinar, porque lo puede hacer por un grupo de WhatsApp, o por ejemplo, o simplemente en alguna de las redes. Entonces, eso ha cambiado radicalmente.
Si sumamos las dos cosas, se explica. La primera, no hay drama, no estamos viviendo una época de gran crisis, al contrario, el país anda razonablemente, no digo bien, pero estamos mejor y tenemos más empleo, tenemos mejor salario, tenemos más obra pública, hay un montón de cosas que están mejor. Entonces, entre eso y el cambio de esa capacidad de relacionamiento, me parece que es la explicación.