Hoy quiero referirme a una problemática muy común que afecta a todos los propietarios de vehículos empadronados. Como seguramente todos aquí sabemos, la calidad de las chapas de automotores y ciclomotores que nos venden cuando empadronamos es de muy mala calidad. Esto se detecta no solo en vehículos que circulan en caminos de tierra, sino que también en aquellos que tienen un transito casi exclusivamente citadino. No es posible que a un vehículo haya que cambiarle las matrículas al año y poco de haberlas colocado, básicamente porque la delantera se torne ilegible. Sabemos que la normativa exige que dicho método de identificación debe estar en correctas condiciones, para que el mismo sea fácilmente visible y tampoco puede haber sido alterado. A su vez, los usuarios que poseen vehículos de alto tránsito como lo son los utilitarios, ya sea dentro de los centros poblados o en el medio rural, están expuestos casi sin excepción a dicho deterioro. La prueba de que las chapas son de muy mala calidad es evidente, no solo por el tiempo que trascurre hasta que quedan ilegibles, sino también porque el metal queda sano, pero sin la cobertura de colores que resalta y contrasta los caracteres, es decir, en situaciones que la estructura está intacta sin golpes o roturas por algún otro motivo. Que pasa en estas situaciones?, los usuarios deben ir a solicitar nuevamente ambas chapas, con el consecuente pago de todo el trámite, dado que se toma como un reempadronamiento, debiendo abonar en Soriano la suma de $4630 pesos. Esto no solo constituye un gasto más que debemos pagar los usuarios, dado que si no lo hacemos corremos riesgo de que los inspectores o Policía Caminera nos detenga y nos cobre una multa. Considero que la intendencia debe actuar de dos formas, primero exigiendo que las chapas se fabriquen como se debe, con materiales de larga duración y/o en aquellas situaciones donde se detecta falla del fabricante, permita realizar el cambio sin costo para el contribuyente. Esto es viable, porque ya se aplica en otra intendencia, quien a través de una revisión previa, certifica que las chapas tienen defectos o mala calidad de fabricación, que derivan en un desgaste prematuro o acelerado, y habilita el trámite sin costo para el propietario. Solicito se envíe este escrito al jefe comunal, y a los municipios del departamento.