“Es una zona un poco complicada, con mucha raíz, mucho árbol, por lo que hay que tener mucho cuidado”, explicó Castaingdebat, en una rueda de prensa, luego de concurrir al predio donde trabaja el equipo de antropólogos. El jerarca agregó que, en la madrugada del martes, se montaron carpas y equipos electrógenos. “Se trabajó durante toda la noche y ahora vinimos a coordinar, de acuerdo al protocolo, los pasos a seguir”, indicó.
Las autoridades y el equipo técnico procuran determinar en qué momento es posible el ingreso de los familiares, quienes ya fueron informados acerca del hallazgo y están conscientes de los plazos, precisó el ministro. Para montar el operativo y resguardar los restos, intervendrán la Institución de Derechos Humanos y la antropóloga forense Alicia Luisardo.
Castaingdebat reveló que “hay algunos huesos y un poco de textil”, además de “una loza de cal importante, lo que dificulta un poco el trabajo”. “De acuerdo a la evolución, será como se proceda en el correr del día y de mañana”, añadió. Luego se enviarán las muestras al banco genético de Córdoba, en Argentina, para cotejarlos con la base de datos. Además, se comenzará a abrir otra cuadrícula de tierra, “porque hay parte de los huesos que están pegados”, lo que implicará un trabajo manual y más tiempo, explicó.
El secretario de Estado dijo que le comunicaron al presidente Lacalle Pou sobre el hallazgo de los restos y el protocolo por seguir. “Este Gobierno se comprometió a colaborar y es lo que está haciendo”, manifestó. Asimismo, informó que el martes 30 se suscribió un acuerdo con la UTE para trasladar, en un plazo de “uno o dos meses”, un cable de alta tensión que obligó a suspender las excavaciones iniciadas en el Batallón 13.