El telón de la tercera etapa de la segunda ronda del Concurso de Agrupaciones de Carnaval en Soriano se abrió con la segunda actuación de murga "Las Fritas" que salió a defender el título y sabía que tenia que dar todo, que precisamente debia utilizar esta ronda de ajuste para corregir algunos detalles menores que había dejado su primera actuación y el propio rodaje con concursos en otros departamentos, la fue ayudando a corregirlos y por lo tanto llegó con nivel y la murga explotó en el escenario de Manzana 20.
"Las Fritas", murga mercedaria fundada en el año 2022 con la dirección responsable de Kevin Valvé y Sebastián Rosso, la propuesta 2024 se titula "Estupidez artificial", el director escénico es Pablo Porciúncula, ensaya en Club Once Corazones y Club Ayuí, la puesta en escena de Kevin Valvé, arreglos corales Pablo Porciúncula, textos Martín Sosa Cafasso, maquillaje Gabriela Rosas y taller artístico "Ls Fritas".
El plantel estuvo integrado por Alvaro Sosa, Maikol Carbajal, Roberto Carlos Varela, Ruben Farabelli, Julio Sebastián Rosso, Federica Pereyra, Mariana Castro, Ricardo Saucedo, Santiago Maraboto, José Airala, Andrés Cáceres, Pablo Porciúncula, Danilo Silva, Oscar Kevin Valvé, Homero Mesa Arroyo, Leonardo Rodríguez, Kevin Cano, Alcides Silva.
Desde que se abrió el telón la murga se paró y cantó convencida de la propuesta que estaba ofreciendo al público y al Jurado, con un coro muy afinado, musicalidad muy variable como la caracteriza a Las Fritas y un texto que tiene varios pasajes muy interesantes.
Una actuación notable de Mariana Castro como Colombina, en el papel de la Inteligencia Artificial llevando el hilo de la propuesta de la murga, el acompañamiento de Sebastián "Grillo" Rosso, que tiene su punto más alto en ese contrapunto entre la murga y Colombina que se termina cuando ésta le pide a la murga ya que tanto hablan de inclusión, le respondan por qué hay tan pocas mujeres en las murgas y allí la murga se queda sin respuesta.
En lo previo al saludo final el "Grillo" reflexiona junto a Colombina sobre el deseo de cambiar, de volver a la comunicación más humana, bajando esa influencia que hoy riene la tecnología, que ha hecho perder esa comunicación entre las personas y en especial en la familia, lo que la gente reconoce y retribuye con el aplauso.
Otro punto alto de la murga es la retirada donde la murga logra la mayor comunicación con el público que la despide de pie y aplaudiéndola, una hermosa bajada.
Una actuación con un ajuste hacia arriba que la pone entre las candidatas y con posibilidades de defender el título, en un concurso que muestra en murgas una competencia muy cerrada.