José Coselino es uno de los directores responsables, un "veterano" en esto del Carnaval, con experiencia en Montevideo y en el Interior, de los históricos que este 2024 tiene la dicha de salir junto a su hijo también un destacado murguista, en este caso Mauro como director escénico y José como dijo sonriente "me pasó para la cuerda", la primera vez que ambos salen en esas posiciones, y lo hacen en esta "Redoblona" fraybentina que dejó pipones a los espectadores de la Manzana 20.
Preguntarte las primeras sensaciones con tantos carnavales encima, ¿vale preguntar si seguís sintiendo emoción al bajar del escenario?
"Sí, sí, es inevitable, uno piensa en el momento antes de subir, cuando está ahí atrás, probando sonido, probando traje, es inevitable, después los nervios y llegar con soltura llegar a reventar en la retirada y disfrutar en el medio, con algunos percances que tuvimos, que son parte folclórica de ésto, pero me dejó una sensación buenísima, con un público espectacular, lograr cercanía con el público es muy difícil, este año la murga apostó un poco más al humor, está más fresca, muy distinta al año pasado, es una murga que hizo un giro de 180 grados, es la primera vez que hago este tipo de murga, por algo me pasaron para la cuerda, con la llegada de Mauro como ya lo conocen como director y arreglador, muy conforme con la pasada de la primera ronda".
¿Quedaron satisfechos entonces?
"Sí, la repercusión del público espectacular, tenemos cosas a ajustar que las sabemos más nosotros, como pasada estuvo redisfrutable que es lo importante y técnicamente veremos la grabación para ver lo que hay que ajustar".
Quizás ya salieron varias veces y no lo sé, pero tener enfrente a tu hijo Mauro, ¿cómo lo sentiste?
"Salimos junto sí, pero este es el primer año en que él está como director y yo en la cuerda, un placer por un lado, nervios por otro, porque me parece que soy yo el que tengo que tirar los tonos o estar ahí, lo redisfruto, después lo veo bailar, divino, se mueve bárbaro, espectacular y le da frescura a ésto. Uno ya está en su tiempo de cambio, más cerca del arpa que de la guitarra, estamos más para el BPS, este año él quería que yo estuviera en la cuerda con él, lo empecé a disfrutar desde los ensayos y hasta ahora, y esperemos que hasta el final del Carnaval cada vez mejor".
¿Has podido ver algo de las demás agrupaciones de la categoría?
"No, nunca fui de mirar las demás murgas, ni cuando salía en Montevideo miraba, es un error mío, debería hacerlo. Me reconforta que haya muchas murgas, que el nivel se haya elevado, que se esté trabajando en serio, que apuesten a mayores cosas, la vuelta de Golpe y Quedo en Fray Bentos es algo extraordinario, una murga añeja, de la que formé parte un montón de años con ellos, trabajan muy bien, tienen buen gusto para todo, esperemos que aparezcan más jóvenes. Mercedes que mantenga este Carnaval por favor, que es hermosísimo, allá en Fray Bentos se está intentando reflotar, a mucho pulmón, con carencias aun, lo importante es no perder las ganas, si perdemos las ganas, perdemos todo, si se pierde el espiritu se va todo. A los gurises les pido que se acerquen a las murgas, no importa si cantamos bien, podemos hacer otras cosas, la murga no es solo cantar, podés actuar, escribir, hacer una puesta en escena, iluminar, hacer los sonidos, confeccionar trajes, encierra muchas cosas, esperemos que continùe este camino, es necesario, que la gente disfrute Carnaval.
Se podrá criticarnos que la murga dice cosas que a veces molesta, algo folclórico desde que era chico, desde siempre en Carnaval , la murga sale y critica, los gustos son cosaas aparte, también están las tendencias políticas, hay que dejarlas de lado, ahora estamos mucho más sensibles, muchas cosas molestan a través de las redes como hablamos en la propuesta de este año, no olvidemos lo lindo que es la piel, erizarse, transpirar, emocionarse, eso es murga, eso es Carnaval".
Tuviste que aprenderte un montón de nombres famosos para la canción de los Olimareños, un tema muy difícil, casi sin respiración y una interpretación muy difícil.
"No sabés lo que fue almacenar esa cantidad de nombres famosos, Florentino El Diablo de Los Olimareños, yo lo canto solo con la guitarra es una samba y son 20 minutos, y hay que respirar, creo que salió, la dicción se enendió bien, no se escapó ningún personaje, fue una apuesta que nos pareció que era buena, se hizo de la mejor manera, no se te puede pasar el pulso, si te apurás hacés gárgaras en lugar de cantar, siempre se acelera todo, por eso la tarea del director de cuidar y cuidar, y los gurises que tocan la bata, la verdad que me saco el sombrero, los vine a ver al Jazz a la Calle, viste lo que tocan, contentisimos con la organización, con el montaje de todo esto y la fiesta, el espectáculo".