Humoristas Pantarrey realizó una actuación redonda, no sólo en cuanto a humor, sino poniendo sobre el escenario un tema muy sensible relacionado con una historia de identidad de género, contada por el grupo, pero con su protagonista real en el centro de la escena, algo que realmente puso sobre la mesa para la reflexión, el debate, y cómo la familia asume ello y cuestiona a la propia sociedad la forma en que encara a nuestros niños, niñas y adolescentes a la hora que quieren plantear su identidad.
En este caso cuando la abuela se empeña en darle la muñeca sabiendo ella nació nena y ella la deja de costado, incluso después intenta jugar a la pelota con ella y ahi hay otra respuesta favorable, hacia la abuela, pero no era solo eso, si no que iba más allá, cuando quería hablar con los mayores y no se lo permitían la dejaban de lado.
Aquí se lo contamos en una partecita de la actuación con los veraderos protagonistas y con la entrevsta al final con Marcelo "Mexicano" Núñez director de Pantarrey.
Llegando al final de lo que muchos no conocen es su propia historia, esa que con tanta naturalidad se atrevió a contar ante miles de personas con el apoyo de un grupo de compañeros y de su familia especialmente, allí en un costado del escenario Samuel, el protagonista principal, junto a su abuela (personificada por Damián Zubiaurre) y Florencia Manzanares entona la canción.
Cuenta Samuel "todos pueden expresar lo que sienten, es por eso que un día me animé. Era una tarde invierno, estábamos charlando con mi madre de la vida frente a la estufa, y aparece mi abuela y dice: "escucharon lo dijeron en la tele, hay niñas que quieren ser niños". Me senté en medio de mi madre y mi abuela, las miré y me pregunté, y me pregunto, y les pregunto, ¿por qué no? ¿Dónde está escrito que no pueda ser así?...
Y allí es Florencia Manzanares quien pone voz y expresión al cantar
"todo se transformó en primavera,
resurgí y grité, me abracé y me acerqué,
sin miedos solté mis cadenas
y volé,
volé tan alto que ya no hay rastros de lo que fui...
No queda nada, nada de nada
sólo quiero amarme, sin importar el qué dirán
No queda nada, nada de nada
Me pido perdón por haberme escondido
entre la gente y en el silencio
ya no pretendo callar
sólo abro mis alas
y a volar
y a volar..."
Canción inédita en letra y música de Gonzalo Carrasco (Pantarrey 2024)
Mi familia, qué familia!!!
Recién finalizada la actuación de Pantarrey y con toda la adrenalina encima a pesar de la experiencia que ya tiene encima, Marcelo "Mexicano" Núñez respondió a @gesor sobre esta primera subida al escenario de Manzana 20.
¿Qué primera sensación te dejó el espectáculo de hoy a partir que se conocen las historias del espectáculo? Yo no sé cómo catalogás vos esta presentación de Pantarray hoy. Si para vos hay un antes y un después de esto, o si esto es una historia más de las tantas que venís contando hace más de 20 años.
"Creo que es una historia más con una responsabilidad diferente. Primero hablé con la familia, que estuviese convencida que esto iba a ser una exposición pública de Samuel. Entonces, planteado desde ahí, con la autorización de los padres, yo empecé a cranear lo que quería, por dónde quería ir.
Lo que tenía claro es que no quería exponer el personaje. Para mí era mucho más fácil que Samuel saliera a hablar y decir lo que sentía, lo que pasa, lo que siente, lo que es. Y lo intenté encarar por otro lado.
Prácticamente bajarme a una sutileza en la cual siempre estoy preguntando y queriendo decir a esa abuela que todas las personas tienen, por un baby boomer, una generación vieja, digamos, entre comillas, la generación que tiene otra forma de pensar. Hacerla entender a la abuela que ella y ahora él sienten otra cosa. Entonces pasa por ahí. Esa es la historia verdadera.
Y ahí arrancó la historia. Para mí era un desafío más grande. Es más, este año me preocupé mucho más porque se entendiera la historia, que el verdadero humor que después se le fue metiendo, por otras características. Donde siempre interrumpiera, donde siempre estuviera preguntando, donde no se perdiera esa pregunta como una muletilla, mi abuela, quiero decirte algo, abuela, quiero decirte algo. Y también entender que la abuela es sorda y no es sorda. Muchas abuelas son así, muchas familias son así. Escuchan y barren abajo de la alfombra. Y es parte de la cotidianeidad de hoy, de lo que nos está pasando en este cambio generacional. Para mí fue un desafío, tuve que leer mucho sobre baby boomer, generación milenio, generación de cristal. Para empezar a poner humor a la primera humorada y al espectáculo.
Y la segunda humorada, la abuela, un día estaba en Colonia, y bajaron de un ómnibus, cuarenta señoras, todas de playa, y dije, esto es una escena de humorada. Porque qué hermosura, todas estas doñas con sus tuppers, sus bolsos, sus cosas. Entonces después fui enrabando lo de la abuela con la historia de Samuel, para poder contar algo de lo que ella siente. Y su personaje es él, es su personaje, que en realidad es su vida real".
Veíamos que cada vez que Samuel preguntaba, enseguida la abuela y los demás mayores, como que le decían, está, pero anda para atrás.
"Exacto".
El dejarlo de lado siempre, el no permitir que contara lo que quería contar, eso lo dejaste muy patente sobre el escenario.
"Es que me parece que eso es lo que yo más tenía miedo. Y lo pregunté varias veces, mirá que les pregunté varios tablados, ¿se entiende la idea? ¿Cómo se entiende el mensaje y por dónde va? Lo del humor después es relativo, porque yo el humor ya lo tengo claro, te puede gustar, yo hago humor de situación, de chistes, de escena, de esto, de lo otro, busco todo estilo, a veces le pega mejor, a veces le pega menos, a veces no gusta; pero no importa. O sea, el humor yo lo tengo claro. Lo más difícil este año era contar algo que no se me fuera de las manos.
No lo llevé ni por lo sexual, ni por lo que sienten, ni por nada. Traté de darle la sutileza que correspondía al tema para hacer conciencia y para vivir la realidad que estamos viviendo todos. Este cambio generacional es lo que se viene hoy. Quizás poniendo un límite, porque no es tan extremista, el percibirme una cosa, el percibirme otra, yo quizás no estoy tan afín con eso, pero bueno, es lo que vivimos hoy, hoy es lo que vivimos. Y bueno, creo que pasa por ahí el espectáculo de este año y mostrar eso, que se puede trabajar ese tipo de temas buscando el humor y siendo lo más sensible posible al momento de presentar un espectáculo".
¿Cómo crees que lo recepcionó el público aquí o en tablados?
"En tablados bárbaro. La parte final, es más, venimos antes de los tíos. Los tíos yo los tomé como una aceptación a que los tíos vienen a... tengo el apoyo, somos nosotros mismos. Es más, yo quería a Drag Queen, no queríamos, queríamos dos de Negro y que todos hiciéramos algo como apoyando la situación. Que después viene de eso, que claro, una secuencia de humor, es la que he tenido en años la más explosiva en todos tablados, en todos los lugares. Muchos personajes, Benavídez, Pimienta, los ven transformados, que nunca lo van a ver, o sea, son personajes públicos. Y enseguida bajar al relato final de Samuel, era como pegarle un cambio rotundo".
Buscaste de alguna manera personajes grotescos de la sociedad nuestra, conocidos, y llegaste a un final sublime.
"Exacto, para poder hacer esas contradicciones de llevarlo a algo distinto y bajar, en donde él explica en realidad muy bien lo que le pasa y lo que siente, incluso preguntando a mí, a ellos y a la gente, ¿por qué no? ¿Dónde está escrito que no puede ser así? Es así, esa frase la sentí cuando la escribí, porque es así, no está escrito en ningún lado, cada uno es como es y hace lo que siente y lo que piensa. Y creo que la canción, Gonzalo Carrasco, que fue quien la escribió, música y letra, 17 textos hizo para llegar a ese final donde era ponerse en carne del personaje y contar con una canción lo que él diría".
Pero además, a partir de la sordera inicial de la abuela, también lograste este año mayor humor que otros años.
"Sí, eso me han dicho también".
Con cosas mucho más sencillas, no hubo un humor chabacano ni nada, todo lo contrario.
"Buscando el doble sentido. Son propuestas, son años, lo vengo trabajando. Este año yo perdí mucha gente de los planteles anteriores, se fueron otros rubros, entonces también fue un desafío para mí volver a empezar, volver a escribir. Y el trabajo es lo que te lleva, y la convicción y las ganas es lo que te lleva a hacer estos espectáculos. Yo ya lo tenía claro en mi cabeza, a veces lo lográs, a veces no. Y vi con la persona, al armar yo el espectáculo, yo fui buscando los personajes en función de... Un presentador: Benavídez. Presenta, relata como prácticamente habla. Pimienta me hacía los quiebres, Florencia que trabaja, Martín que lleve trabajando conmigo, otros que se fueron incorporando, se me bajaron varios. Entonces fue un desafío grande, muy grande para mí.
A Damián ya lo había visto de abuela, yo sabía que él iba a ser mi hilo conductor. Le armé para él todo lo que él quería hacer. Damián es el hermano de Sammy, o sea, está todo entre familias, es hermoso, es hermoso".