Durante su intervención en la media hora previa en la sesión de la Junta Departamental de Soriano, el Edil Israel Acuña, se refirió a la salud mental expresando que "es un componente fundamental de la calidad de vida de cualquier individuo y, por ende, un factor crítico para el desarrollo de una sociedad saludable.
En Uruguay, al igual que en muchas partes del mundo, la salud mental se ha convertido en una preocupación creciente. A medida que avanzamos en el siglo XXI, los desafíos relacionados con la salud mental se han vuelto más evidentes y urgentes. Uruguay, un país conocido por su estabilidad política y calidad de vida, se enfrenta a una creciente crisis en materia de salud mental.
Aunque los datos precisos son difíciles de obtener, diversos indicadores apuntan a una situación preocupante. Uno de los problemas más apremiantes es la alta tasa de suicidios, que se encuentra por encima del promedio de América Latina. La depresión y la ansiedad también son comunes, afectando a un porcentaje significativo de la población".
Añadió que la pandemia de COVID-19 "ha exacerbado estos problemas, agravando la carga de la salud mental en el país. Varios factores contribuyen a la problemática de la salud mental en Uruguay. Uno de ellos es la falta de acceso a servicios de salud mental de calidad. Aunque el país cuenta con una red de atención médica pública, ésta a menudo está sobrecargada y no puede satisfacer plenamente las necesidades de la población en materia de salud mental. Además, persiste un estigma social que rodea a los problemas de salud mental, lo que dificulta que las personas busquen ayuda o hablen abiertamente sobre sus desafíos. Por ello aplaudimos esperanzados el refuerzo presupuestal de más de 20 millones de dólares en la próxima rendición de cuentas del gobierno nacional que además de volcar más recursos, pone en relieve la situación".
Para Acuña, "la situación económica y social también desempeña un papel importante. El desempleo y la falta de oportunidades pueden contribuir al estrés y la ansiedad, lo que a su vez afecta la salud mental de las personas. También la constante presión que los medios y las redes sociales indirectamente crean sobre las personas y los estándares sociales que muchas veces se hacen inalcanzables, genera frustración, depresión y otras condiciones que afectan la salud mental. Y la más grave de todas, las adicciones, que destruyen todo, incluido la salud mental. En algunos casos es consecuencia y en otros causa de las enfermedades mentales. La falta de educación sobre la salud mental en las escuelas y en la sociedad en general perpetúa la falta de conciencia y comprensión de estos problemas".
Tras ello se refirió específicamente a la situación de los trabajadores municipales, "sabemos de primera mano que algunas tareas generan una condición donde se hace necesario el apoyo y el seguimiento de los trabajadores y de su salud mental, dado que su actividad diaria los expone a situaciones difíciles de distinta índole. Creemos que más allá de lo que se hace hoy por hoy desde el gobierno departamental, es necesario hacer más y generar un área que se especialice en esto y que ayude a generar algunas estrategias, como ser: Promover una cultura de apoyo y bienestar: -Fomentar un entorno de trabajo donde los trabajadores se sientan seguros para hablar sobre sus problemas de salud mental sin temor a estigmatización.
Educación y sensibilización: -Ofrecer capacitación y talleres sobre salud mental para que los colaboradores comprendan mejor los problemas de salud mental y cómo pueden buscar ayuda si es necesario.
-Promover la empatía y la comprensión entre los compañeros de trabajo para crear un ambiente de apoyo.
Acceso a recursos de salud mental: -Proporcionar acceso a servicios de salud mental, como asesoramiento o terapia, ya sea a través de un seguro de salud o a través de programas internos.
-Establecer una línea de ayuda o recursos de referencia para que los trabajadores puedan buscar ayuda de manera confidencial.
Políticas de licencia por enfermedad mental: - Establecer políticas de licencia por enfermedad mental que reconozcan la importancia de la salud mental y permitan a los trabajadores tomar tiempo libre cuando sea necesario sin temor a represalias.
Seguimiento y evaluación: -Realizar encuestas regulares de bienestar y salud mental para evaluar el impacto de las iniciativas implementadas y realizar ajustes según sea necesario.
Confidencialidad y privacidad: -Garantizar que cualquier información sobre la salud mental de los trabajadores se maneje con absoluta confidencialidad y que solo se comparta con aquellos que necesitan saberlo. Creemos que estos aportes pueden ser útiles para dar mayor relevancia y consideración a este flagelo que tiene la sociedad y particularmente los trabajadores municipales Que mis palabras al respecto pasen a la comisión correspondiente de la junta, al ejecutivo departamental y a la directiva de ADEOMS".