Durante la ceremonia de homenaje a 20 años del fallecimiento de Luis Bernardo Pozzolo, el Partido Colorado lo recordó y en el cementerio de Mercedes, este lunes 31 de julio 2023, hizo uzo de la palabra José María Romero, quien durante su emocionada oratoria expresó: "Pasados 20 años, no es una tarea fácil, rememorar a una figura que dejó henchidos nuestros corazones de batllismo y militancia. No vamos a referirnos a su acción política, conocida ya en este departamento que se dio el lujo de tenerlo como su más genuino resentante.
Representante de abajo. Con miles de sacrificios desde la cuna. Pero valiente y determinado para ayudar a su madre en la crianza de sus hermanos en tiempos de dificultades.
Pozzolo se agiganta en cada recuerdo.
Pozzolo se hace más grande aún, 20 años después por las características personales como SER HUMANO.
Porque supo ser un buen hombre, y un gran político.
Mano tendida porque supo de necesidades. Supo de esfuerzo y sacrificio.
Pero desde el momento que se convirtió en Edil Departamental, llevó sin parar su impronta irrepetible, a los demás cargos representativos que le sucedieron.
Sereno y a la vez pasional.
En el año 1997, oportunidad de un homenaje en la Asamblea General a dr Luis Batlle, dijo el Negro:
“– no se imaginan y quizás no lleguen a comprender, esta rara mezcla de honor y emoción que siento en estos momentos, porque no es una simple forma de decir, sino que es una actitud del alma”.
Me pasa lo mismo, ya que, en estas horas, he rebuscado en mi pensamiento las palabras justas, para recordar el inmenso magisterio político en que Luis Bernardo Pozzolo se transformó.
En ese discurso, habló también de la causa batllista.
Dijo que era y sigue siendo una gran voluntad servicial para el País.
20 años después, sus palabras se emplean de principio a fin, 100% para él.
Se entreveró siempre con los de abajo; con los que menos tenían. A todos cuanto pudo, les dio una mano, le entregó su palabra de aliento y los comprometió – sin promesas fáciles y sin engaños – para ser continuadores y sostenedores de la gran bandera del Partido Colorado.
El Negro, honró a sus amigos queridos. En sus tiempos buenos y en los tiempos malos.
La tarea dedicada en nombre de nuestra colectividad en la capital del País, no fue obstáculo para que cuando pudo, se recostara en las márgenes del Río Negro para compartir charlas fraternas de la vida misma, y de la política en general.
En todo Soriano habría una enorme cantidad de personas a las que fue cercano con su corazón; según su decir… los que siempre estuvieron; Rene Gramont, Rafael Saizar, el “Chiche” Ponte y otros tantos, Mi emoción, me permite hoy solo recordar algunos. Caminó siempre por las calles de Soriano acompañado de su gente, de sus seguidores.
De esas mujeres y hombres en chancletas que idolatraban su figura, por su don de gente y por su calidez humana. Traigo a mi memoria respetuosamente a los Ediles Fausto Malleti, Juan José Torres, su hermano “José Batlle Pozzolo, entre otros, con los que muchas noches compartió muchas noches de amistad, y de trabajo político en la redacción de EL RADICAL, donde en sus últimas épocas, supe trabajar.
Y permitan que respetuosamente tenga en mi memoria los chancleteadores de mi familia: Tola, Lalo, Anita y Coro, a los que distinguió abundantemente con sus abrazos sinceros y otras manifestaciones de cariño.
También en el Interior, recorrió cada uno de los baluartes de la 1540, dejando su mensaje político, pero dejando también en cada visita, siempre un pedazo de su corazón.
Insto al Partido a no abandonar jamás su legado. Insto a tenerlo presente siempre.
Insto a tener a mano en cada ocasión, la actitud componedora y fraterna, Así lo hubiera querido.
También dijo Pozzolo; “- Hay que defender las instituciones y afianzar las libertades”.
Para eso trabajó constantemente.
Supo vivir rodeado de pueblo, para hacer de la democracia un ejercicio vivo.
Nuestro recordado de hoy, fue un claro ejemplo de vida de sacrificios, acompasada por una total entrega a la causa publica, que identifica e identificará al Partido Colorado para la inmortalidad.
¡¡ VIVA LUIS BERNARDO POZZOLO!!