El Edil Jorge Cardona fue el designado por la bancada del Frente Amplio de hablar en la sesión solemne, homenaje a los ediles que el 28 de junio 1973 se reunieron, como acto de rebelión contra la disolución de las juntas departamentales y del Poder Legislativo en general, tras el golpe de Estado cívico militar dado el 27 de junio 1973.
Se tomó esa sesión de la Junta Departamental de Soriano como el primer acto de rebeldía del país contra la dictadura, desafiando y enfrentando las órdenes de las fuerzas conjuntas, que el día antes, habían disuelto el Parlamento y las Juntas Departamentales.
En su oratoria, Jorge Cardona, comenzó saludando a los ediles, a las autoridades, "a los ediles presentes el 28 de junio de 1973 y personas que nos honran hoy con su presencia, en esta sesión solemne que nos reúne a conmemorar los 50 años del golpe cívico militar del 27 de junio de 1973. Y en lo que toca especialmente a este Cuerpo, la sesión que sostuvo en rebeldía. Desobedeciendo una orden de disolución, al igual que las cámaras de Diputados y Senadores, y trasmitida por el Sr. Jefe de Policía Ulises Damini, al Presidente Sr. Carlos Rüsch, quien convocó al Cuerpo y constituido éste sesionó, lo cual se transforma en un acto civil oficial de desobediencia y repudio a la dictadura naciente, formando parte de lo que fue la resistencia permanente que se instaló y permaneció junto a la dictadura marcando su carácter ilegítimo. Y resulta especial para la JDS saludar y homenajear aquí al hoy integrante de la misma, edil rebelde hace 50 años y edil electo hoy en el reinado de la Democracia plena, el Sr. Gonzalo Novales". 
Sostuvo Cardona "es un honor para nosotros como demócratas, contarlo como miembro activo de este Cuerpo legislativo, y lo saludamos con respeto.
Debemos mirar hacia adelante, porque vivimos el presente y construimos el futuro, pero nada mejor que las malas experiencias para aprender a llevarnos por el buen camino. Esa es la importancia de mantener la memoria. No es odio, ni rencor, ni afán de revancha, hacer memoria y traer al hoy los contextos, circunstancias y conductas que marcaron nuestro pasado".
Añadió el legislador frenteamplista, "hay que recordar que tuvimos el Estado en manos de una jauría rabiosa, ideológicamente fundamentada en la persecución de ideas y personas, y formando parte de la doctrina de seguridad nacional instalada en la región, sustanciada en el plan cóndor. Que también venía con un plan económico a imponer a sangre y fuego. El resultado fue que en 1985 había en nuestro país un 46 % de pobres".
El 27 de junio de 1973, "finalmente un presidente de dudosa legitimidad encabezó el asalto de nuestras instituciones principales. Las formales como los poderes de la República, pero se apoderaron de la principal institución que tiene una sociedad democrática: LOS DERECHOS INDIVIDUALES. Así, dejamos de ser personas libres, pasamos a estar en manos de cualquiera que portara un carné, una placa, o un arma representando al Estado, sin derechos. Dejaron de ser espacios seguros nuestros domicilios privados y los espacios públicos. Todos fuimos sospechosos, vigilados e investigados como prueban archivos que hoy se conocen".
Cardona recordó, "a los principales parlamentarios que se opusieron a la barbarie, salieron a buscarlos, no respetando fronteras ni nada. Secuestraron y mataron a Zelmar Michelini y Héctor Gutiérrez Ruiz, en Argentina. No lo consiguieron con Wilson Ferreira Aldunate que debió exiliarse fuera del continente, desde donde trabajó incansablemente contra la dictadura. Encarcelaron a Seregni, porque se quedó acá y fue un símbolo de la resistencia. Y otros tantos conocidos y anónimos que hoy no están".
Siguiendo su oratoria, Cardona expresó, "el otro gran bastión de resistencia fue la huelga general declarada por la Convención Nacional de Trabajadores que ocupando lugares de trabajo resistió dos largas semanas los operativos de desalojo, ataques y amenazas. Hasta que encarcelaron a los principales dirigentes sindicales del Uruguay.
Aquí en Soriano tuvimos también jalones de esa resistencia con obreros y estudiantes movilizados. Los obreros papeleros y de ARINSA ocuparon y fueron desalojados a la fuerza y siguieron protestando, marchando por las calles cantando el Himno Nacional".
En ese contexto de hechos "sesionó esta Junta, quizás a la vista desde el presente, los Ediles rebeldes no se percataban de la importancia de aquel hecho que generaron.
Pero luego de estos días, la noche duró 12 años, y pasaron cosas terribles en ese tiempo.
Hubo perseguidos, secuestrados, presos, torturados, exiliados y desaparecidos.
Hubo funcionarios públicos, docentes, a los que se destituyó por tener una categoría política impropia para los que mandaban, quienes categorizaron y dejaron sin trabajo, a otros vecinos, ciudadanos como ellos.
Lamentablemente no todos eran militares, hubo civiles colaboracionistas, delatores, oportunistas, privilegiados que hicieron de la vida de sus vecinos una pesadilla. Hay personas entre nosotros que vieron cosas, en los cuarteles, en las comisarías, y que callan. Hubo mujeres violentadas, torturadas y violadas, entre todas las atrocidades cometidas. 
Soriano tiene diez desaparecidos, cuyas familias esperan conocer la verdad sobre sus familiares y debemos poder decirles dónde están y qué les pasó: Antonio Omar Paita, Nebio Melo Cuesta, Winston César Mazzuchi, Luján Alcides Sosa Valdez, Alfredo Fernando Bosco Muñoz, Carlos Federico Cabezudo Perez, Elba Lucía Gándara Castromán, Modesto Quiñones Pérez, Ricardo Altamirano, y Ricardo Blanco Valiente".
Cardona manifestó "debemos mirar hacia adelante, seguramente, y para eso debemos ejercitar la memoria, en ese pasado está lo que no queremos repetir.
Debemos cuidar y construir nuestra Democracia, día a día, marcando cada acto y manifestación que la deteriore o la cuestione. Todos somos habitantes de este país, todos somos sujetos de derecho, y cuando un uruguayo se margina y se queda atrás, estamos faltando a ese compromiso. Debemos cuidar y mejorar nuestros intercambios, tenemos que ejercitar la tolerancia, debemos entender que hay intereses contrapuestos y que se pueden acercar si hay diálogo, que hay objetivos que son de todos y en los cuales no cabe no tener algún grado de acuerdo. 
El mal ejercicio de la política, como son los actos de privilegio, el uso del Estado con intereses propios o de los amigos, la corrupción, son conductas que debemos censurar en conjunto. Construir una ética de la administración de los bienes e intereses comunes, porque en el desprestigio de la política está el germen de los autoritarismos.
RATIFICAMOS NUESTRO COMPROMISO DE LUCHA POR LA DEMOCRACIA Y LOS DERECHOS DE TODOS Y TODAS, NUNCA MAS DICTADURA".