El miércoles pasado, falleció en Montevideo, un gran ciudadano y ser humano que fue Mario Juan Bosco Cayota Zappettini, MARIO CAYOTA .
Si nos acercamos a su obra y vida política y profesional, se ve claramente la Personalidad multifacética de CAYOTA,; hombre de una profunda fe católica y espíritu humanista, abrazó con invariable amor fraterno una causa, que al menos, a mi me parece fundamental, y sobre todo para todos nosotros, en éstos momentos: que es la CAUSA DEL DIÁLOGO!! Tan imprescindible y necesaria SIEMPRE!
Además de su actividad política, Cayota fue doctor en Filosofía, docente, escritor e historiador. Dedicó varios años de su vida a la enseñanza de filosofía e historia en secundaria y en institutos universitarios locales y extranjeros. A su vez, por más de 30 años fue profesor en la Facultad de Teología del Uruguay Monseñor Mariano Soler.
Fue autor de varias obras, entre ellas: “Cristianos y cambio social en el Uruguay de la modernización” (1896-1919), publicada en 1989, “Optar por los pobres, aunque nos marquen con el hierro”, de 1993, “Artigas y su derrota: ¿frustración o desafío?”, en 2009, y “Un pasado que se conjuga en futuro”, un libro homenaje al “pensamiento y acción” de Tabaré Vázquez publicado en 2022.
Mario también escribió mucho sobre los orígenes del socialcristianismo en Uruguay. Analizó la visión progresista para su época de Juan Zorrilla de San Martín, así como el compromiso social de Mariano Soler. Rescató de Mariano Soler su Carta Pastoral de 1894, dónde realiza una dura crítica a la explotación del capitalismo a los obreros y alienta a su sindicalización. Destaca también a la Unión Democrática Cristiana, central social y sindical fundada en 1904, dónde se defendían las 8 horas de trabajo, el descanso dominical, el salario familiar y la autogestión.
Tiene también muchos trabajos sobre los Principios de la Democracia Cristiana uruguaya que siempre fueron de gran influencia en el PDC y del FRENTE AMPLIO.
En 2006 fue designado embajador de Uruguay en el Vaticano, cargo que ocupó hasta 2011. Unos años después, en 2015, fue designado directamente por el expresidente de la República Tabaré Vázquez para integrar en forma honoraria el Grupo de Trabajo por Verdad y Justicia (GTVJ). Como integrante de este grupo, Cayota fue el encargado de revisar documentos del Vaticano sobre la dictadura. Abandonó el GTVJ en 2018 cuando Vázquez lo volvió a convocar como embajador de Uruguay en el Vaticano. Allí se desempeñó hasta 2020.
El fallecimiento de CAYOTA, fue lamentado por gente de todos los partidos políticos, lo que sin duda demuestra el cariño y respeto por su personalidad.
La Secretaría de Derechos Humanos para el Pasado Reciente y su Directora Matilde Rodríguez Larreta de Gutierrez Ruiz, expresan su dolor ante el fallecimiento de Mario Cayota quién perteneció al Grupo de Trabajo por Verdad y Justicia, en representación de la Iglesia Católica. ¡Que en Paz Descanse!
“Nos dejó Mario Cayota. Fue un hombre de fe cristiana y testimonio de vida comprometido con los más humildes. Uruguay pierde a un destacado intelectual, las comunidades cristianas a un referente y los demócratas cristianos y el Frente Amplio a un compañero de todas las horas”, (comunicó el PDC)
Fue Presidente del Partido Demócrata Cristiano durante la década de los ‘90.
En el período entre 2000 y 2005, fue electo Edil de la Junta Departamental de Montevideo.
Fue un hombre de profunda fe cristiana y coherente con eso enfocó toda su vida en lo que él creía que era la esencia del cristianismo: su opción por los pobres y los desheredados de la Tierra y, simultáneamente, trabajar para construir una sociedad justa, igualitaria y comunitaria. O sea, las bases de la Utopía en la que él creía firmemente.
Así, en el plano político siempre militó en el Partido Demócrata Cristiano (PDC). Acompañó con entusiasmo la fundación del Frente Amplio en el 71 y luchó en primera línea contra la dictadura. Años después fue un gran impulsor del Encuentro Progresista, del que firmó su acta de fundación en su calidad de Presidente del PDC, cargo que ocupó por muchos años. Hijo del Concilio Vaticano II, asumió con convicción la idea de que los cristianos debían abrirse a trabajar mancomunadamente con todos aquellas personas de buena voluntad que creyeran en una sociedad más justa, más allá de sus convicciones ideológicas. Siguió así a Juan Pablo Terra en su camino, que culminó con la fundación del FA en el 71. Decía Jorge Chileno Rodriguez, Pte del PDC
EN SU HOMENAJE Y EN HOMENAJE A TODOS LOS QUERIDOS COMPAÑEROS DEL PARTIDO DEMÓCRATA CRISTIANO, Y A TODOS SUS AMIGOS Y FAMILIARES, SOLICITO A UD. SRA. PTA QUE ÉSTA JUNTA DEPARTAMENTAL REALICE UN MINUTO DE SILENCIO EN SU MEMORIA.