Un día todos los seres humanos tendríamos que mirar por la ventana de Angelina.
Y aunque sea por tan solo un día, mirar la vida con las pupilas de sus padres.
Hace doce años atrás la niña que ahora ayuda a su madre en las tareas de la casa, nacía con una patología rara.
Y con apenas dieciséis días la operaron del corazón.
Era el comienzo de un periplo de viajes, idas y venidas a la capital. Luchas, sacrificios y esperanzas para sus padres.
Peregrinar por hospitales y sanatorios, con todos los miedos, dudas y lágrimas.
Pero Pablo y Stella no tenían el derecho de descansar, había que seguir superando escollos, barreras y dificultades.
En la cuna del sanatorio Canzani, ajena a la realidad Angelina ensayaba sus primeras sonrisas.
Casi simultáneamente se descubre deficiencia en los riñones, que sólo treinta por ciento funcionan.
Nadie de la familia desiste de la lucha.
Hay apoyo, alientos y el contorno colabora como puede y lo poco que tiene.
Angelina crece, camina recorriendo salas de hospitales y sanatorios de la capital.
Aunque sea por tan sólo un día, deberíamos dejar de quejarnos y luchar contra las adversidades de la vida, como lo hacen cada día, desde hace doce años los padres de Angelina.
Hace muchos años la niña que había nacido con la patología del síndrome de Down y deficiencia renal, se acercó y miró a través de la ventana.
Era un día gris, lluvioso y frío del invierno, ella recién pronunciaba sus primeras palabras.
Señaló con el dedo índice la calle y mirando a sus padres exclamó: ¡¡Es un lindo día!!
Mientras aguarda en la fila de transplante de riñón, la niña estudia, va al instituto, crece y se supera.
Cada día se sorprende y se asombra de las cosas simples, cada día es una nueva conquista, simulando que no la miran, Pablo y Stella disfrutan de su sonrisa.
Y en cualquier estación del año, con lluvia o con sol, en verano o en invierno, la niña mira a través de la ventana y exclama: ¡¡es un hermoso día!!
Un día todos los seres humanos tendríamos que mirar por la ventana de Angelina.
Y decir cómo ella, con alegría, es un bello día.
Artigas Osores
Foto Alamy meramente ilustrativa