Una de las opciones más elegidas para vacacionar en estas fechas son los campamentos. En ellos es muy importante seguir las recomendaciones para prevenir incendios y realizar fogones seguros.
Los ahogamientos, al igual que en verano, representan uno de los riesgos más expandidos y saber nadar o contar con destrezas en el agua, no es suficiente para evitarlos.
El Aedes Aegypti es el mosquito transmisor de las enfermedades Dengue, Zika y Chikungunya, y en este período vacacional es fundamental tomar medidas para prevenir su transmisión.
Finalmente recordamos que en esta semana se realizan un gran número de fiestas donde la concentración masiva de personas también constituye un riesgo.
En estas fechas unas de las opciones más elegidas es acampar. En ese contexto el riesgo de ocurrencia de incendios forestales o de campo, fundamentalmente por fogones mal apagados, aumenta.
Como es sabido, la mayor parte de los incendios forestales y de campo (el 98%) son producto de la acción humana. Generalmente, un descuido, una imprudencia al encender fuego y la imposibilidad de control posterior, suelen ser las causas más habituales. Por eso en la prevención de incendios es fundamental el compromiso de la población a través de conductas responsables.
En tal sentido, el Sistema Nacional de Emergencias exhorta a la población a extremar los cuidados y seguir las siguientes recomendaciones:
¿Cómo podemos contribuir para evitar incendios?
- Antes de encender fuego, limpiar bien el lugar en un radio de por lo menos 5 metros quitando especialmente hojarasca, pinocha y todo material combustible.
- Rodear siempre el fuego con piedras, ladrillos o similares en un radio de 1 metro.
- Nunca dejar el fuego sin vigilancia.
- Al retirarse del lugar apagarlo completamente asegurándose de que haya quedado totalmente extinguido.
- No arrojar colillas encendidas o cualquier otro elemento encendido desde los vehículos.
¿Cómo ayudar si vemos que se inicia un incendio forestal o de campo?
- Dar aviso de inmediato a las autoridades a través del 9-1-1.
- Alertar a los vecinos y trabajar en forma conjunta con ellos.
- Para evitar el avance de las llamas, limpiar el área de elementos combustibles hasta que llegue la respuesta de bomberos.
¿Qué hacer si el fuego es dentro de la vivienda?
- Llamar al 9-1-1 y cortar el suministro eléctrico y de gas.
- No perder tiempo intentando recuperar objetos.
- Evacuar manteniendo la calma.
- Si es en un edificio, usar escaleras libres de humo y nunca el ascensor.
Ahogamientos
Si estas vacaciones el disfrute va a ser en zonas costeras, el Sinae exhorta a continuar reflexionando sobre conductas responsables para disminuir los siniestros en el agua. La mayor parte de los ahogamientos (el 94%) ocurre en zonas no habilitadas para baños y donde no hay presencia de guardavidas. En ese sentido, se recuerda: “playa con guardavidas, playa segura”.
Según la OMS, los ahogamientos son evitables y el tema es un asunto de salud pública común a todos los países. La principal causa de los siniestros de esta naturaleza, es sobreestimar las posibilidades propias y subestimar las condiciones del entorno en el momento de tomar un baño.
El mayor porcentaje de ahogamientos en nuestro país se registra entre adultos mayores de 44 años, seguido por adolescentes y jóvenes (40%). En todos los casos, prevalece la cifra de hombres sobre la de mujeres (70% hombres, 30% mujeres).
Además de los guardavidas, la Armada Nacional (a través de personal de Prefectura) es otro de los actores fundamentales para el rescate en diferente tipo de embarcaciones y para salvaguardar la vida de las personas. Las tareas se complementan con la labor de los marineros de playa que realizan patrullajes permanentes en camionetas, motociclos, bicicletas y a pie.
En caso de elegir pasar las vacaciones en zonas costeras, el Sistema Nacional de Emergencias exhorta a la población a extremar los cuidados y seguir las siguientes recomendaciones:
- Elegir zonas habilitadas para baños. Éstas son las que tienen puesto de guardavidas.
- Si hay viento fuerte, no jugar con inflables en el agua. En situaciones normales, si el inflable se fuera mar adentro, nunca ir detrás para recuperarlo.
- Si no se conoce el lugar, chequear previamente la profundidad con los pies. Entrar al agua con la cabeza hacia adelante, nunca “de cabeza”.
- El banderín rojo en la orilla identifica corrientes de retorno. Se genera un canal en la arena por el pasaje de agua y arrastra hacia adentro.
- Los niños y las niñas son responsabilidad de la persona adulta a cargo. La vigilancia deberá ser atenta, lo adecuado será mantenerlos a su alcance. Que sepan nadar, no elimina riesgos.
En caso de ver a una persona en peligro:
Comenzar la cadena de supervivencia. El primer eslabón es informar que alguien está en situación de peligro. Seguidamente no meternos en el agua y dejar esa tarea a los profesionales. Por último, si tenemos algún inflable, cuerdas o ramas, intentar alcanzársela a quien esté en una situación comprometida.
En caso de estar en peligro:
Si es arrastrado/a por una corriente, mantener la calma e intentar flotar. Nunca nadar contra corriente sino en paralelo hacia la costa o flotar para esperar ayuda manteniendo el brazo en alto como señal de auxilio.
Significado de las banderas en la playa
Verde: habilitada para baños
Amarilla: precaución
Roja: No habilitada para baños
Negra: Tormenta eléctrica
Banderín rojo: Escollos submarinos o corriente de retorno
Verde con cruz roja: Riesgo sanitario