Mercedes deberá seguir esperando por la tan ansiada planta de tratamiento de aguas residuales. Pese a ser un proyecto largamente planteado, discutido y proyectado todo parece indicar que las aguas residuales de Mercedes seguirán tirándose sin ningún tratamiento al río Negro. El director de OSE, Edgardo Ortuño al dialogar con @gesor se refirió a este tema y a la escasa inversión en obras que realizará el organismo en lo que queda de gobierno.
Tú mencionabas los recortes que se realizaron al presupuesto de obras. ¿Quiere decir que se van a hacer sólo obras menores, y que la constante necesidad de hay de hacer trabajos de reparación por pérdidas de agua, y ampliación de la red va a seguir existiendo en este periodo de gobierno?
-“Nosotros decimos que con lo que está presupuestado hoy, y lo que está incluido en el proyecto de universalización de saneamiento, que se ha reducido significativamente en relación a lo que había anunciado el presidente de la República, que ustedes recordarán eran U$S 1.000 millones en saneamiento para 124 ciudades en el interior, con un saneamiento universal a toda la población de esas ciudades. Hoy tenemos la afectación de recursos sólo para el saneamiento en 61 localidades y en forma muy parcial. Y eso significa efectivamente una reducción de lo previsto para invertir en la ciudad.
Esta propuesta con un nombre tan si se quiere, ambicioso como de universalización del saneamiento, en el fondo lo que termina es transmitiendo a pocas ciudades, menos de la mitad de las planteadas, obras muy acotadas, que en el caso de Mercedes efectivamente son U$S 2.6 millones de dólares de un proyecto que suponía sólo en redes y en rehabilitación del sistema de alcantarillado en la ciudad U$S 8 millones. A eso deberíamos agregarle los U$S 11 millones que hoy decimos que están en duda y que entre todos debemos aunar voluntades para que efectivamente ahora a mitad de año OSE incluya en su presupuesto la realización de esta planta de tratamiento de aguas residuales, porque sino, efectivamente, a los U$S 8 millones de recortes en redes, más U$S 5,5 millones de recorte en sustitución de tubería, es decir en el proyecto RAC (Reducción de Agua no Contabilizada), tendríamos que sumarle la no realización de esta planta de tratamiento. Que insisto estaba prevista en los planes que dejó la administración anterior para comenzar sus obras en el año 2022, estamos ya entrados en el 2023, la teníamos prevista para el 2024 con un financiamiento externo que se acaba de caer y por lo tanto amerita esta preocupación que estamos planteando y que todos los actores locales y nacionales, hacer un acuerdo para que se incluya en el presupuesto y tengamos esas obras ejecutadas en este quinquenio y no pasen para el futuro la represa de Casupá o de Sauce chico y tantas otras obras que han caído por ese recorte de U$S 220 millones en todo el quinquenio.
La sequía nos muestra el valor del agua, nos muestra la necesidad de hacer obras de infraestructura en un tema tan grande y creo que tanto a nivel local como a nivel nacional es una buena cosa para acordar entre todos y nosotros nos comprometemos en el directorio de OSE proponer y ojalá que lograra aprobar por unanimidad un levantamiento de estos topes presupuestales para las obras de agua y de saneamiento que estamos necesitando. Porque no olvidemos la reforma de la Constitución que conocemos como reforma del agua, que fue votada por el 65% de la población en 2004, establece desde aquel momento que el acceso a los servicios de agua y de saneamiento son un derecho humano fundamental. Entonces, tanto OSE como la comunidad tenemos que hacer los mayores esfuerzos para concretar las obras necesarias para que lleguen estos servicios a los menores costos a toda la población y eso supone en esta coyuntura el levantamiento de los recortes presupuestales que se impusieron en 2020 para poder llegar cuanto antes a concretar estas obras que ya están prontas, que ya están diseñadas como proyectos para la ciudad y que lamentablemente todavía no se han concretado”.