Era un momento especial para él subir al escenario en la jornada de cierre de la primera ronda del Concurso Interdepartamental de Agrupaciones del Carnaval de Soriano, es que está muy fresco el recuerdo de su tío el "Negro Carlos", Juan Carlos Montero Rodríguez fallecido el 17 de diciembre 2022 que iba a salir con ellos en la murga Atacados, pero Joaquín Montero (h) lo asumió como uno de los creados del título este año y director escénico y junto al grupo de compañeros brindaron una grata sorpresa con esta humilde murga.
Joaquín apenas bajado del escenario, dialogó con @gesor, visiblemente emocionado todavía.
¿Primeras sensaciones?
"Paaa mucha angustia, pero de emoción, queríamos largar todo en el escenario, porque tuvimos muchos problemas en el transcurrir del año, muchas piedras, cambios de compañeros, siempre remando todos parejos, por eso mucha emoción, pisar de vuelta las tablas, fue mucha emoción".
Fue una grata sorpresa, un grupo conformado con gente de años en murga, otros nuevos, un rendimiento que si bien tiene cosas para ajustar, fue en líneas generales bueno y todo ello estaba bajo tu responsabilidad.
"Somos cinco o seis que tenemos trayectoria en el Carnaval, y sumamos gente nueva que tiene muy pocas posibilidades de arrimarse a otro grupo y este año apostamos a hacer semillero, más allá de la competencia en sí. No hay tanta posibilidad en el Carnaval mercedario, ya que sale una murga y ya tiene su plantel y si no llevo a Fulano y Mengano y armamos algo, y la gente que quiere hacer Carnaval realmente es la que se queda con las ganas de hacer Carnaval".
Uno esperaba verte en Aguante la Tacada y al no verte se sorprendió, ¿qué pasó?
"La fundé yo en el 2006, y este año se la dejé a mi hermano, arrancamos juntos, había gente que tenía talento, pero ellos querían era sacar una murga para competir, pero desde el 2006 hasta el 2017 que saqué Aguante la Tacada siempre fuimos renovando gente y estuvimos en el podio generalmente. Salimos cuatro años terceros, un año segundo compartido con La Celeste, y un año solo último y después de ahí pasó una mala jugada... Y cuando La Tacada volvió quería volver a tener "pesos pesados", y a mi no me gustaron algunas cositas y aposté a la juventud".
¿Cómo la viste a la murga arriba del escenario?
"A la gente principiante la vi nerviosa, capaz que tuvo algún desajuste el coro en el tema de los gurises, la gente vieja metió su garra como siempre, pero se notaron algunos desajustes los que sabemos que estamos ahi arriba, pero lo que nosotros apostamos se hizo y ahora tenemos la ronda de ajuste donde buscaremos ajustar esos detalles".
Un espectáculo digno que la gente terminó premiando aplaudiendo de pie.
"Sí, cumplimos con lo que querìamos, que a la gente le gustara que era lo principal y la murga no aburriera".
En lo personal una noche muy especial para vos...
"Sí, para mi, para mi familia, ellos no se esperaban, los hermanos de él (Negro Carlos) no se esperaban lo que íbamos a hacer nosotros, ni con la murga de nosotros ni con esta murga nueva, y vamos a esperar el abrazo de ellos allá en el barrio".
¿Qué sentiste cuándo entraste a cantar el solo para el Negro Carlos?
"Me acordé de mi padre, de las trasnochadas en los ranchos, del vino tinto que lo escuché cantar cuando era chico, muchas sensaciones, me acordaba que podía estar parado en un rincón y gritando ¡vamo la murga ché!!! yo lo veía, ahí en la tribuna lo veía".
Uno recuerda a Joaquín viejo, al Negro Carlos, cantando en una esquina, con ustedes chicos acompañándolos...
"Siempre anduvimos cantando con papá y al costado siempre andaba él y nos dijo, éste es el camino, y a veces alguno se tuerce, pero siempre nos guiaron por el camino correcto".
Y los fantasmas del vino que comenzás cantando...
"El duende del vino era él, ese tema era para él y sé que le llegó...".
¿A quién le dedicás la actuación?
"A mis hijas que pasamos frío, mal, que la murga con sus problemas, ellas siempre estaban ahí, a mi familia, a mi madre, a mi padre, y también a las familias de los compañeros que siempre apoyaron".