Al asumir como comandante en jefe del Ejército el Gral. Mario Stevenazzi defendió la importancia de la fuerza que calificó como «un soporte fundamental para el país, pudiendo atender de forma eficiente, situaciones comprometidas con el único objetivo de lograr la salvaguarda y el bienestar de sus habitantes».
El ministro de Defensa Javier García agradeció los servicios prestados por el Gral. Gerardo Fregossi y dijo que el Gral. Stevenazzi «es un general de una larguísima trayectoria», con un «conocimiento amplísimo del Ejército y de su personal y su función. así que consideramos que era la persona adecuada».
El acto realizado en el Comando del Ejército estuvo encabezado por el presidente Luis Lacalle Pou y el ministro de Defensa, García. También asistieron la vicepresidenta Beatriz Argimón, el subsecretario Rivera Elgue, el secretario de la Presidencia Álvaro Delgado, el director general del Ministerio de Defensa Fabián Martínez, el jefe del Estado Mayor de la Defensa, Gral. del aire Rodolfo Pereyra, el comandante en jefe de la Armada, almirante Jorge Wilson, autoridades del ministerio y de gobierno, integrantes de las comisiones de Defensa del Parlamento, oficiales generales y superiores de las tres fuerzas y retirados.
Durante la ceremonia, el ministro de Defensa impuso en su cargo al Gral. de Ejército Stevenazzi y el presidente Lacalle Pou, le hizo entrega del sable réplica del perteneciente al Gral. Artigas.
El ministro García explicó en rueda de prensa que el relevo en el Comando del Ejército se debe a que «el comandante Fregossi pasa a retiro obligatorio por cumplimiento de su edad y el relevo asumiendo el comandante Stevenazzi es una decisión, obviamente, como marca la ley, discrecional del Poder Ejecutivo, y el Poder Ejecutivo. Se consideró por parte del presidente de la República, junto a quien habla, el mando superior, que era la persona indicada para liderar y comandar el Ejército en este momento».
Indicó que «es un general de una larguísima trayectoria, tanto a nivel nacional, prácticamente en todos los escalones del Ejército pero, a su vez, en las altas jerarquías cubriendo varias responsabilidades, en el país y también en el exterior. Tanto en cumplimiento de misiones militares como misiones diplomáticas como agregado militar. Es decir, tiene un conocimiento amplísimo del Ejército y de su personal y su función así que consideramos que era la persona adecuada».
Consultado sobre qué indicaciones dio respecto a la línea de trabajo que puede llevar adelante el nuevo comandante en jefe, el ministro respondió que «la que hasta ahora se ha llevado, porque las Fuerzas Armadas son instituciones bicentenarias, que tienen una doctrina que nace con Artigas, que ha atravesado la historia del país y que es parte de un proceso donde los sucesivos comandantes agrandan esa historia pero con el fundamento de esa doctrina artiguista que está en la génesis, en el ADN del Ejército Nacional y, obviamente, cumpliendo con las misiones que el mando superior, político y civil, indica. Estas han sido muy claras y muy bien llevadas por el Ejército en estos particulares tres años de gobierno con la pandemia mediante, es decir, esa política de frontera, esa política de cercanía, de asistencia al ministerio de Desarrollo Social, de asistencia al pueblo oriental en las circunstancias más difíciles, en los inviernos, repartiendo comida, pero también cumpliendo aquellas misiones que son esenciales del Ejército: el cuidado de nuestra soberanía, la misión fundamental que define al Ejército. Así que, la continuidad de una doctrina, el trabajo como veníamos haciendo, obviamente con el tono personal que cada uno de nosotros tiene por ser distintos como todos somos», puntualizó.
Discurso
En su discurso de asunción el comandante Stevenazzi agradeció «la confianza que hoy se deposita en mi persona. Estoy plenamente consciente de la responsabilidad que se me asigna, la cual asumo desprendida de cualquier elemento que no sea la preocupación permanente por la correcta administración de los medios humanos y materiales del Ejército Nacional. Como en todos los tiempos, en toda actividad, existen problemas en lo que habrá que trabajar con mayor o menor esfuerzo y aquellos que se les haga necesaria la intervención del mando superior se lo haremos saber en forma responsable y franca; pero no es este ni el momento ni el lugar de hacerlo ni para plantearlos. No obstante, quiero simplemente mencionar para de alguna manera dar tranquilidad a nuestros efectivos que uno de los temas que acaba de acaparar nuestra atención de inmediato refiere al proceso de adecuación de elementos vitales para los integrantes de la institución vinculados al desarrollo profesional y personal de cada uno», consignó.
Stevenazzi sostuvo que «han existido y seguirán existiendo voces discordantes con la función del Ejército Nacional, e incluso por ahí hay quienes ponen en duda la existencia del mismo, haciendo en consecuencia un tremendo daño a sus integrantes. En su mayoría, gente que proviene de sectores sociales humildes; sin embargo, la capacitación para el cumplimiento de su misión principal, relacionada a la responsabilidad por la ejecución de las actividades militares de la Defensa Nacional, nos ha permitido ser un soporte fundamental para el país, pudiendo atender de forma eficiente, situaciones comprometidas con el único objetivo de lograr la salvaguarda y el bienestar de sus habitantes».
Indicó que «los ejércitos se modernizan, las amenazas van cambiando pero hay un elemento, un eslabón del sistema que es insustituible, que es fundamental para el cumplimiento de los objetivos que se plantean. Me refiero al soldado de todas las jerarquías, persona que mientras está en servicio dedica su vida al cumplimiento del deber, persona que no tiene seguridad si tendrá un fin de semana libre en el mes y que muchas veces no ve nacer a sus hijos porque está trabajando. Persona que cuando se requiere una mano está ahí lista para ayudar. Persona que cuando se retira lo hace con lágrimas en los ojos y queda a la orden por si lo necesitan. Persona que no siempre es comprendida y muchas veces se pretende invisibilizar. Mantener altos estándares de capacitación de los medios humanos, agudizando el ingenio, la iniciativa para suplir carencias. Es la responsabilidad de todo líder en los diferentes niveles, pero también lo es el ejercicio responsable del mando, demostrando preocupación por los problemas de sus subordinados. La información frontal y clara, desde las cadenas de comando, es una obligación ineludible que permitirá la ejecución efectiva del cometido asignado, así como lo es la lealtad en todas direcciones que contribuirán en fortalecer los niveles de confianza imprescindibles para el cumplimiento de cualquier misión», puntualizó.
Antes de finalizar, quiero referirme al señor General de Ejército don Gerardo Fregossi, que hoy deja la vida activa después de más de 44 años de servicio, agradeciéndole en nombre del Ejército Nacional por su esforzada y permanente dedicación a usted y su familia, nuestros mejores deseos en esta nueva etapa que comienza. Me resta agradecer a las autoridades nacionales, departamentales, invitados especiales, nuestra familia, nuestros amigos que hoy se hicieron presentes en este Comando General y señalar a los efectivos del Ejército Nacional, que este Comandante, cuya carrera transcurrió principalmente por diferentes unidades militares en contacto permanente con efectivos de todas las jerarquías, hará su mayor esfuerzo para que nuestra institución se mantenga entrenada, equipada, pero fundamentalmente con la necesaria cohesión y un alto espíritu militar. Muchas gracias.