En las últimas semanas fue designado nuevo juez para la causa de los Vagones de Canelones. Recayó sobre el juez de cuarto turno Héctor Iriarte Espino. El juicio oral y público se sustanciará en la ciudad de Canelones aunque todavía no hay fecha fijada.
De los tres policías formalizados en noviembre de 2019, dos murieron: el jefe de inteligencia en 1975 y 1976, Julio Guillén y el oficial mayor Vitale. Quien continúa es el policía de primera en aquel entonces Alejandro Ferreira. Mientras que por el lado de las víctimas denunciantes que eran diecisiete, falleció uno.
Los Vagones de la Escuela de Policía
Este lugar perteneciente a la Escuela de Policía de Canelones, ubicada en el centro del Parque Artigas, empezó a funcionar en 1968 un centro de detención y tortura. En su el patio trasero se colocan tres vagones en forma de U, los que fueron utilizados para secuestrar a los detenidos y como salas de tortura, aún no se ha podido determinar por las investigaciones el momento exacto en que comenzó su funcionamiento.
En ese lugar los vagones estuvieron operativos con esa función hasta 1975. Posteriormente se trasladaron y se reubicaron tras una casa precaria en el otro extremo del mismo Parque.
Ese espacio se integraba en un circuito represivo que operó en esa ciudad, constituido además por la Depósito Cine Lumiére, la cárcel de la jefatura de policía y los Vagones del Barrio Olímpico. (fuente: Sitios de Memoria Uruguay)
En 2021 el Tribunal de Apelaciones desarchivó la causa “Los Vagones”. Fue la primera causa sobre delitos de lesa humanidad tramitada bajo el nuevo Código del Proceso Penal.
(*) fotografía extraída de Caras y Caretas.