Las recientes resoluciones del Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca (MGAP) autorizando el uso de agroquímicos, algunos de ellos prohibidos en Europa, para los viveros de UPM son decisiones técnicamente injustificadas.
En su momento expresamos nuestro beneplácito con el accionar de MGAP cuando después de años de gestiones por parte los vecinos de Guichón, afectados por la contaminación del vivero de UPM, se tomaron finalmente muestras de los cursos de agua y se verificó el origen de los contaminantes que generaron daños al ambiente de la zona, especialmente la calidad del agua y las especies nativas.
Ahora no podemos menos que repudiar el accionar del MGAP y en especial de la Dirección General de Servicios Agrícolas que cedieron ante la presión de la empresa UPM y su subsidiaria Forestal Oriental, las que así consiguen cambios normativos a la medida de sus necesidades
La celeridad de las actuaciones y la especificidad de las medidas incluidas en las resoluciones 1129/022 (25-10.22) y 1179/022 (03-11-22) así lo evidencian.
La declaración del Ministro Mattos sobre como si no se cumplía con la voluntad de UPM habría que haberla multado deja en evidencia además que el Estado actuó bajo presión de UPM para que se le autorizara el uso de los productos que venía utilizando estando prohibidos (1)
Queda en evidencia así una vez más el verdadero carácter de las operaciones de UPM en Uruguay, su desinterés por los temas ambientales y como está en condiciones de ejercer indebidas presiones sobre el estado entendiendo que tampoco podemos dejar de lado la relación previa, por más de siete años, del Ing Mattos con la fundación UPM.
Así, si el ministro avaló por su voluntad esas decisiones, debiera su renuncia serle requerida por el Presidente de la República y si lo hizo por directivas del Poder Ejecutivo debiera de haberse negado a hacerlo y renunciar en defensa de los intereses de nuestra gente y no de la empresa UPM.
Movimiento por un Uruguay Sustentable (Movus)
15 de noviembre de 2022