Lo que no se transforma en palabra no existe, por esta razón queremos nombrar a todas las personas que siguen haciendo posible el sostén y la existencia de la “olla popular de 21 de setiembre” en el barrio Mondongo mercedario.
Estamos prácticamente desde que comenzó la pandemia, otoño del 2020. Como cada año, hacemos pausa en verano y retomamos en marzo. Para terminar este 2022 nos están faltando siete sábados. Cumplimos 33 ollas, así que llegaremos a 40 ollas este año.
El MIDES-INDA (Apoyo especial a Programas Invierno 2021) nos trajo una única donación hace un año: 6 litros de aceite, 42 kg de arroz, 53 kg de fideos, 32 kg de lentejas.
Nuestra dinámica ha sido la de “picar” los viernes de noche, cocinar el sábado temprano y distribuir las porciones de comida al mediodía.
Desde 130, 170 y hasta 200 porciones cada sábado, a niños, jóvenes, ancianos. En invierno, cazuela de lentejas. En primavera, salpicón de pollo.
Nombraremos a las instituciones y a las personas que han sostenido semejante acto solidario en el último año. Al sindicato de maestras, ADEMU Soriano, por los no perecederos, igual que al plenario del PIT-CNT. A Jorge, Mariana, José, Pablo, por los perecederos. A la panadería San Antonio y Todo Empaque. Por su fuerza de trabajo, a Yovanna, Oswaldo, Richard, Sofía, Teresa, Ana, Huamani, Miguel, Juancho, Guillermo, Amaru. A Carmen y Gianina por estar al golpe del balde. Y los que pasaron a echar una mano en lo que fuera, lavar una olla o varias, cebar mates un sábado o un viernes: Pedro, Decler, Olga, otro Richard, Alicia, la sonrisa de Amanda.
A los compañeros del sindicato papeleros que al hacer una pausa en su olla de los lunes nos donaron los víveres restantes.
Y a las personas solidarias, anónimas que nos dan ánimos, aliento, para adelante, dedito para arriba, sus bendiciones desde sus creencias religiosas, aunque muchos de nosotros no profesamos ninguna, a quienes entendieron que solo el pueblo salva al pueblo, que hoy por vos y mañana por mí.
(*) comunicado