Vamos a plantear un tema que nos transmitieran vecinos del departamento, habida cuenta de la situación que se suscita en el paso de frontera del puente Gral San Martín. Cuando uno se acerca en vehículo a las diferentes vías de acceso a las cabinas de inmigración, si no hay tráfico o afluencia de coches, no existe nada indicativo, ninguna señalización lumínica que indique cual es la vía que está habilitada en ese momento, generándose situaciones de confusión. Por otro lado, en circunstancias de gran afluencia de vehículos, en cada vía hay varias cabinas ubicadas en forma continua, que cuando se pretende transitar en el carril respectivo, se hace imposible saber si están habilitadas o si quedaron libres, puesto que también carecen de una luz que identifique tal circunstancia, para que el automovilista pueda avanzar y acceder a la caseta y al funcionario que realiza las gestiones, agilitando la dinámica del proceso. Incluso en ocasiones, el funcionario en cuestión, se asoma o sale para hacer señas con la mano, toda una paradoja. Todas estas señalizaciones lumínicas a que hacemos referencia son de muy bajo costo y de utilización corriente en pasos de frontera, donde se instalaron este tipo de configuración. Por tanto, ante el reciente anuncio de reformas en el paso de frontera, creemos importante poder contar con este tipo de indicación o algún otro que cumpla con lo descripto y con el fin perseguido. Solicito traslade nuestras palabras a la Dirección Nacional de Pasos de Frontera, al coordinador Prefecto de Fray Bentos, a la dirección Nacional de Inmigración, al Ministerio de Defensa, a la diputada María Fajardo y a la comisión respectiva.

Por otro lado, hace unos días atrás se suscitó una situación por demás llamativa en una transmisión de radio en vivo de nuestra ciudad. En el estudio había personas invitadas y varios panelistas. Dentro de los concurrentes había sindicalistas aparentemente identificados con el Frente Amplio. En un momento dado, un edil de este cuerpo lee un mensaje que le mandó un oyente, que consultaba donde podía borrarse del gremio en cuestión, dado que lo había intentado sin éxito. Esta simple consulta enfurece al sindicalista, que se torna agresivo, hasta el punto que en un momento dado y en una actitud patoteril, invita al edil a salir afuera. El tema en cuestión es que a continuación en forma violenta, pretendió agredir físicamente a nuestro compañero edil, generando una situación en la que intentó golpearlo. Si bien es una situación puntual, esta forma de actuar no fue ni reprochada, ni reprobada, ni censurada por ediles del FA, más bien sentimos algunas excusas. Nos llama poderosamente la atención, que depende del lado que estemos es la vara con que medimos la violencia, el atropello y las agresiones. Tal vez el estar del otro lado amerita haber pasado por el rio Jordan, pero no lo compartimos. Solicito traslade nuestras palabras al Ejecutivo Comunal y a la diputada María Fajardo.