La semana pasada el recluso Mario José Ibarra, quien se encuentra cumpliendo reclusión, debido a un reintegro a la Unidad 24 de INR en Pense, por haberle quedado pendiente pena de anterior delito, estando cumpliendo este saldo de la pena anterior tuvo una salida transitoria.
Al regresar a la Unidad 24, Ibarra, se siente indispuesto y pide al personal del centro de reclusión que le proporcionen un laxante, ya que se siente mal.
Eso levantó sospechas del personal de la Unidad 24 y por lo tanto debió ser tratado a nivel asistencial ya que se vio en una situación de riesgo y confesó haber ingerido algunas bolsitas con estupefacientes, durante una salida transitoria y de esa manera al regresar a la Unidad 24 ingresar la droga y luego, una vez estando adentro de la cárcel poder evacuar y hacerse de esas bolsitas con la droga. Como no pudo expulsarla y al correr riesgo su salud, pidió laxante y quedó al descubierto la maniobra, y la Policía extrajo de la materia de este recluso las bolsitas con los estupefacientes, dándose cuenta a la Fiscalía de Turno, interviniendo además de personal del INR, la Brigada Departamental Antidrogas.
Una vez solucionado el tema sanitario, el recluso Mario Sergio Ibarra con varios antecedentes y relacionados con negociación de estupefacientes, fue formalizado y condenado por proceso abreviado tras acuerdo entre la Fiscalía y la Defensa del imputado, por un delito de suministro y posesión de estupefacientes, especialmente agravado, a la pena de 4 años de penitenciaría, de cumplimiento efectivo, audiencia llevada a cabo en el Juzgado Letrado de Primera Instancia de 4º Turno, a cargo de su titular Dra. Ana Julia Fuentes.