“El sistema es deficitario, está claro que lo es, y va seguir siéndolo” dijo el Dr. Alfredo Cabrera Casas analizando la situación financiera del BPS. El presidente del organismo en diálogo con @gesor analizó el sistema de la Seguridad Social en nuestro país, indicando que inevitablemente se le deberá aplicar una reforma.
Cabrera recordó que la informalidad ha caído 3 puntos en los últimos meses. “Se presentó un estudio de la Universidad de la República, el Programa de Naciones Unidas y el Ministerio de trabajo, donde la informalidad cayó 3 puntos. Estructuralmente cayó 3 puntos. La informalidad de antes de la pandemia era de 25% , y ahora es 22%. Hay 3 puntos menos de informalidad estructural y genuino”. Agregando más adelante el presidente del BPS comentó que producto de la pandemia por el Covid 19 el organismo tuvo que pagar más subsidios por diferentes prestaciones, comparables entre marzo de 2020 donde “se pagaban 50 mil subsidios de desempleo, un número estructural. En abril paga 150 mil, en mayo paga 200 mil, y después se mantiene bajo el pago de seguro de enfermedad, y en diciembre cuando viene Omicron estalla uy suben los subsidios por enfermedad”.
Más adelante Cabrera remarcó “el sistema de seguridad social tiene un déficit que es estructural que, a mediano plazo si no se hace algo va a ser un problema. El BPS no está por dejar de pagar jubilaciones ni mucho menos, pero hay una realidad que tiene dos patas, una baja tasa de natalidad y una baja tasa de mortalidad y una mayor expectativa de vida. Los uruguayos nacemos muy pocos, tenemos muy pocos hijos, menos que la tasa de reemplazo, sin dudas, y además estamos viviendo más tiempo y con mejor calidad de vida. Entonces el viejo sistema de solidaridad demográficamente es imposible no existe una relación de activo suficiente para pagar la asistencia a los pasivos y por más tiempo. Eso es estructural, se da en Uruguay y en otros países del mundo, y en los hechos los países han ido buscando ajustar sus sistemas a las realidades demográficas que los condicionan. O sea que la importancia de que se genere un consenso lo más amplio posible del sistema” que apunte a esa reforma del sistema.
Agregando más adelante que “en los hechos” la edad de retiro del trabajador uruguayo “queda bastante bajo con relación a otros sistemas”. Indicando que se deberá hacer un análisis a mediano plazo “porque además este no es un problema suyo o mío que somos activos y vamos a jubilarnos, pero sin dudas va a ser de nuestros hijos. Tal vez nosotros podamos navegar con el viento de otras épocas”. Remarcando “y ese me parece que es el punto central. Cuando se habla de pasividades parece que se está hablando de los veteranos, y no, porque los veteranos ya están jubilados. El pasivo tiene un derecho inalienable que nadie se lo va a tocar. Esa persona va a seguir cobrando su jubilación y se puede quedar 100% tranquila. El problema es para los que vienen atrás”.