El cáncer de cuello uterino podría evitarse en el 100 % de los casos tomando acciones adecuadas en salud. Se trata de uno de los tumores malignos de los más se conoce su etiología e historia natural.
En nuestro país el CCU es el tercer cáncer más frecuente en mujeres luego del de mama y colorecto; en el período 2014 – 2018 se le diagnosticó a un promedio anual de 313 mujeres y otras 133 fallecieron por esta causa. (Registro Nacional de Cáncer – Uruguay).
Si bien en nuestro país las tasas de incidencia y mortalidad han disminuido levemente en los últimos años, continúan siendo más elevadas que las tasas de los países desarrollados. Su principal causa es la infección por ciertos tipos del Virus del Papiloma Humano (VPH o HPV, por sus siglas en inglés) del que existen más de 100 genotipos. De estos, aproximadamente 40 se trasmiten sexualmente y de estos 40, 15 están vinculados al desarrollo de CCU.
Uno de los factores de riesgo para CCU es el antecedente de una lesión pre- maligna de alto grado (HSIL) que no tienen síntomas pero ante una infección persistente por HPV pueden devenir en CCU. Este proceso evolutivo por lo general lleva algunos años en producirse, por eso es importante realizarse controles ginecológicos periódicos para detectarlo en etapa pre-maligna, evitando la aparición del cáncer.
Existen otros co-factores que favorecen el desarrollo de CCU como el tabaquismo, inmunodeficiencias (VIH, trasplantados) y también factores socioeconómicos que podrían afectar la accesibilidad a la vacunación contra el HPV y estudios de tamizaje.
¿Cómo prevenirlo?
Mediante la vacunación: la vacuna contra el HPV es segura y eficaz para disminuir la incidencia de lesiones precancerosas y cáncer de cuello uterino. Se recomienda que la vacunación se realice -idealmente- previo al inicio de la actividad sexual y, por lo tanto, de la exposición al virus.
En Uruguay, la vacuna tetravalente (contra 4 tipos de HPV) se incluye en el esquema nacional de vacunación de forma gratuita a niños de 11 años. Estas vacunas también previenen – en ambos sexos – otros tipos de cáncer asociados al HPV (cánceres genitales, anal y del área otorrinolaringológica). Frente a dudas sobre la indicación de las vacunas contra el HPV se debe consultar siempre al médico.
También son importantes como medidas de prevención el utilizar métodos de barrera en las relaciones sexuales y no fumar.
¿Cómo detectarlo a tiempo?
PAPANICOLAOU O PAP (citología cervical): El Ministerio de Salud Pública recomienda realizar el screening de cuello uterino con el estudio del papanicolaou (PAP) a partir de los 21 años hasta los 69. Las dos primeras pruebas de PAP se realizan de forma anual y si son normales se repiten cada tres años. Estos controles deben hacerse independientemente de haberse vacunado contra el HPV.
Es importante recordar:
-
Las mujeres a partir de los 21 años tienen un día de licencia anual paga para realizarse el PAP según la ley 17.242.
-
La realización del estudio del PAP es uno de los requisitos obligatorios para la obtención del carnet de salud (decreto N 571/2006).
-
La ordenanza 402/2006 dispone que el PAP sea sin costo de prepago por el sub-sistema privado.
Se han desarrollado nuevos abordajes para el tamizaje del CCU como la prueba de ADN de HPV. Hay evidencia científica clara a favor de las nuevas tecnologías para la prevención del cáncer. Además, se cuenta con estudios de investigación de calidad realizados en países de América Latina que respaldan estos resultados con datos procedentes de la región.
La prueba de HPV y la prueba de Papanicolaou se realizan de la misma manera: un profesional de la salud usa una herramienta especial para raspar suavemente el cuello uterino a fin de extraer las células que se estudiarán en la prueba. Debe tenerse en cuenta que el resultado de una prueba de HPV puede cambiar durante un período de meses o años a medida que el cuerpo combate el virus.
Objetivos respecto al CCU a nivel internacional:
La Organización Mundial de la Salud (OMS) realizó las siguientes recomendaciones con la finalidad de eliminar el cáncer de cuello uterino para el año 2030:
- Vacunar al 90 % de las niñas antes de los 15 años
- Realizar el tamizaje del 70 % de las mujeres a los 35 y 45 años de edad con un test de HPV
- Realizar el tratamiento del 90 % de las mujeres con resultados positivos en las pruebas de tamizaje.
Desde el Programa Nacional de Control del Cáncer del MSP se organizó junto al Policlínico Móvil de Uruguay Crece Contigo del Ministerio de Desarrollo Social, el Instituto Nacional de la Juventud (INJU), la Red de Atención Primaria (RAP) de ASSE y el Hospital de la Mujer del Centro Hospitalario Pereira Rossell (CHPR) una campaña de prevención del cáncer de cuello uterino. Se busca concientizar a la población sobre la importancia que tiene la prevención de esta enfermedad y aumentar la cobertura del PAP.