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19 de March del 2022 a las 09:53 -
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Seis años de prisión al homicida de Darwin Pintos Vera en zona de paraje Pense
Se trata de asesinato ocurrido en agosto 2021 en el que Ernesto Raúl Gianechini Almanza mató a su padrastro

Este jueves, en sede del Juzgado de Primera Instancia de Primer Turno de Mercedes, a cargo de la Dra. Ximena Menchaca, se llevó a cabo audiencia solicitada por la Fiscalía Departamental de 2º Turno de Mercedes, a cargo de ssu titular Dra. Stella Alciaturi,(foto 2) en un caso que trabajó en conjunto con las Fiscales Adjuntas Dras. Loreley Escobar y Vanesa Pereira, para ratificar el acuerdo arribado para transitar por proceso abreviado entre Fiscalía y la Defensa y el imputado de la muerte de Darwin Orlando Pintos Vera de 44 años, ocurrido el 22 de agosto 2021 en zona de paraje Pense.

LOS HECHOS
Recordamos que en su momento, a la hora de imputar al responsable del hecho, la entonces titular de la Fiscalía Dra. Silvana Mastroianni relató los hechos, estableciendo como presunto autor del homicidio de la pareja de su madre, a Ernesto Raúl Gianechini Almanza que con fecha 22 de agosto, el imputado dio muerte a su padrastro Darwin Orlando Pintos Vera de 44 años, utilizando para ello un cuchillo.
Pintos era pareja desde hace 11 años de la madre del imputado, viviendo en el barrio Pense, junto a tres de los hijos de esta mujer, el imputado, otros dos, así como dos nietos. Desde hacía dos semanas también se encontraban de visita en la casa otra de las hijas de la mujer junto a su pareja y sus dos menores hijas, ya que este hombre estaba trabajando, haciendo una changa junto a Pintos en un monto de eucaliptos en la zona de paraje Pense.
También estaba de visita desde el 14 de agosto, otro de los hijos de la pareja de Pintos.
El hogar familiar está ubicado en camino Pense, frente a la Escuela 25, una zona rural, a la cual se ingresa a través de un camino que dista unos 50 metros de la calle y está compuesta de varias construcciones.
El sábado 21 de agosto 2021 luego de cenar todos juntos, el occiso junto a su pareja y varios de los hijos y las parejas de éstos sobre las 23.00 horas deciden concurrir caminando al bar que funciona como tal y también tiene maquinitas, ubicado a la vuelta de la casa de los mencionados, a unos 500 metros.
Sobre las 0.30 horas una de las hijas con su pareja regresaron a la casa donde habían quedado uno de los hijos de la mujer del occiso y los menores de edad. Sobre la 1.30 también lo hizo otra de las mujeres, que se acostó a dormir.
En el bar, la víctima y el imputado estuvieron ingeriendo bebidas alcohólicas sin ningún inconveniente entre ellos, jugando al pool y conversando.
Pasadas las 3.30 de la madrugada en momentos que Pintos fue al baño en el bar, su pareja se quería ir por lo que le dijo a un testigo que cuando llevara a su hijo en moto hasta la casa, le dijera que no hiciera ruido porque uno de sus hijos estaba durmiendo y tenía que levantarse temprano a trabajar. En eso aparece la víctima, a quien el testigo le comenta lo expresado por la pareja de Pintos, por lo que éste se molestó con su pareja, tomándola del buzo a la altura del pecho, lo que fue visto por el imputado, quien atinó a propinarle un golpe de puño en la cara a su padrastro, el cual cayó al suelo, comenzando a sangrar, siendo separados por las personas allí presentes.
Ante el incidente, uno de los hijos de la mujer, llama a dos de los hermanos que estaban en la casa y como no atendieron les envió un mensaje avisándoles que hubo una pelea entre Pintos y Raúl. La mujer de la víctima y uno de sus hijos deciden retirarse caminando y luego de media cuadra, el testigo le ofreció a la mujer arrimarla en la moto hasta la casa, continuando el hijo de aquella caminando solo. Más atrás venía caminando la víctima.
Cuando la mujer llega a la casa, despertó a uno de sus hijos que había quedado durmiendo (Fabio) para contarle que Pintos estaba enfurecido porque Raúl le había pegado y que había dicho que iba a apuñalar a todos en la casa, por lo que aquel se levanta.
Luego fue a despertar a su hija Daniela, a quien le solicitó que la acompañara hasta el bar para traer al imputado Raúl y a Pintos, contándole lo sucedido en el bar, accediendo la testigo a acompañarla.
Salieron hacia el bar la pareja del occiso, junto a Daniela y Nicolás, cruzándose en el camino a 100 o 150 metros con Pintos, que venía en la moto junto al testigo F.G. el cual lo dejó allí y continuó la marcha. Viendo los tres mencionados que Pintos tenía el ojo izquierdo hinchado y estaba sangrando, por lo que regresan los cuatro juntos hacia la casa, recriminándole Pintos a su pareja, que por su culpa Raúl le había pegado porque había inventado que él le quiso pegar a ella.
Al llegar a la entrada a su domicilio por camino Pense y antes de ingresar por el camino que se accede a la vivienda, se encuentran con Fabio que esperaba en el lugar quien se puso a conversar con Pintos para tranquilizarlo, ya que se encontraba ofuscado por lo sucedido previamente en el bar.
La pareja de Pintos y el hijo de ella Nicolás se retiran para la finca, mientras que Daniela se queda cerca para ver si la víctima se calmaba.
Fabio siguió la conversación con Pintos expresándole que borracho como estaba no iba a solucionar nada, que se tranquilizara y que mañana hablaban cuando estuviera fresco.
En ese momento fue cuando llegó el imputado, a lo que la víctima comenzó a insultarlo y provocarlo diciéndole textual "vos puto de mierda vení a pegarme ahora, te agarré del cogote en el bar pero me sacaron, dale vení", pero Raúl no contestó y siguió hacia su vivienda a lo que la víctima comentó "este se fue a calzar" haciendo referencia a que iría a buscar algo para pelear o un cuchillo.
Momentos después aparece el imputado con un cuchillo en una de sus manos, de unos 15 cm de hoja aproximadamente y cabo de guampa color crema, a lo que Pintos le decía "dale pegame, vamos a pelear", mientras que buscaba algo para defenderse. En un momento cruzó la calle hacia el lado de la Escuela 25, pasó el alambrado e ingresó al predio de dicha institución en la zona donde hay una cancha de fútbol, siendo seguido de atrás por Raúl, comenzando después a pelearse hasta que en un momento el imputado le propinó dos puñaladas con el cuchillo que portaba, una en la zona del abdomen y otra en el pecho, cayendo al piso Pintos, falleciendo en el lugar. Todo lo que fue visto por los testigos Daniela Fernández y Fabio Espinosa.
Cuando comenzaron a pelearse Pintos y Raúl en el predio de la escuela, Daniela, la hermana del imputado, llamó al Servicio 911 contando lo sucedido y como estaba muy nerviosa le pasó el teléfono a su hermano Fabio para que continuara hablando, viendo ambos que Raúl se apartó del cuerpo del fallecido y se quedó contra el alambrado allí existente.
Posteriormente Daniela se acercó a Pintos tomándole el pulso constatando que no tenía, le levantó el buzo y vio una herida que sangraba. 
Luego fue a avisar a su progenitoria de lo ocurrido y a despertar a su hermana Mercedes.
La pareja de Pintos salió de la casa hasta el lugar del hecho viendo que su pareja estaba todo ensangrentado y tenía dos puntazos en el pecho y que su hijo Raúl se encontraba parado contra el alambrado ubicado al costado del camino de ingreso a su casa, donde luego fue encontrado por la Policía, el cuchillo utilizado por él para darle muerte a la víctima.
Dos funcionarios policiales habían concurrido al bar sobre las 3.20 horas porque se recibió un 911 que había una pelea fuera del mismo, tratándose de una pelea entre otras personas y previa a la de Pintos y el imputado. Al arribar ya no encontraron a nadie, entrevistándose con los allí presentes, realizando una recorrida por la zona para su ubicación pero al no localizar a nadie se retiraron.
Cuando estaban a la altura de camino Pense y Ruta 2 recibieron otro comunicado vía radial que había una persona herida con arma blanca en la zona de la Escuela 25 por lo que regresaron, viendo que había un masculino tendido en la cancha de la escuela referida que yacía sin vida, concurriendo posteriormente personal de Investigaciones y Científica realizando las tareas inherentes a sus cometidos, encontrándose el cuchillo de cabo de guampa tirado en el pasto en el mismo lugar donde la madre del imputado había visto que estaba parado su hijo Raúl.
Concurrió ambulancia de Vivem constatando el fallecimiento de Pintos por múltiples heridas de arma blanca. Se le efectuó espirometría al imputado arrojando como resultado 0,58 dg/lt de sangre.
Se practicó autopsia al occiso por Junta Médica del ITF en Montevideo surgiendo que todas las lesiones halladas presentan características de vitalidad, la herida mortal es la herida punzo cortante localizada en cara anterior de hemitórax derecho que en su trayecto lesiona el pulmón derecho penetra el pericardio y secciona la arteria aorta, lo cual determina un hemopericardio y hemotórax derecho que ocasiona la muerte por exanguinación, shock hipovolémico hemorrágico. La lesión encontrada en el primer dedo de mano izquierda podría corresponder con un intento de defensa, siendo la única herida con esas características.

FALLO

En virtud de lo solicitado por la Fiscalía, en esa ocasión la Dra. Ximena Menchaca (foto) había formalizado la investigación por un delito de homicidio y a su vez accedió a la prisión preventiva como medida cautelar.
Este jueves tras acuerdo por proceso abreviado, en la Fiscalía a cargo de la Dra. Stella Alciaturi y la Defensa del imputado, habiendo verificado que se hubieran cumplido todos los requisitos, la Dra. Ximena Menchaca dictó la sentencia por la cual se condena a Ernesto Raúl Gianechini Almanza como autor penalmente responsable de un delito de homicidio (sin agravantes), a la pena de 6 años de penitenciaría.


 

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