Recordamos que próximo a las 2.30 horas de la madrugada de este sábado se tomó conocimiento por llamado al 911 de la presencia de personas en el local donde funcionaba Panadería La Coruña, que permanecía cerrada por estos días, ubicada en Gomensoro y Casagrande, se registraba la presencia de personas en su interior, por lo que se despacharon móviles policiales hacia el lugar.
Al arribar el primer móvil alcanza a ver que un masculino intenta darse a la fuga por calle Casagrande siendo detenido.
En el lugar se constata que había daño en la reja de una de las ventanas, la que había sido cortada con un elemento adecuado para ello y posterior rotura de vidrio, por donde habrían ingresado.
Ya dentro del local se constata que los delincuentes, que eran dos, habían acondicionado para llevarse, dos garrafas de 13 kg y algunas cuchillas, a lo que posteriormente el titular del comercio, agregó faltante de alrededor de $ 1.000 en monedas.
Posteriormente en rastrillaje por la zona personal policial encuentran una cizalla en unas plantas, con la cual habrían cortado la reja.
Ambos delincuentes fueron detenidos y están siendo investigados además por su presunta participación en los robos tras daños para ingresar en Rosas Hnos, El Colmenar y Barraca San Pedro y no se descarta a un supermercado en jurisdicción de seccional 2a, que también registra similar modus operandis, a estos tres.
En el caso está trabajando personal de Seccional 2a en conjunto con la Fiscalía de 2º Turno de Mercedes, a cargo de su titular Dra. Stella Alciaturi.
Tras las actuaciones a nivel policial y de Fiscalía fueron puestos a disposición judicial, donde se ratificó acuerdo por proceso abreviado arribado por las partes, por el cual se condenó en el Juzgado Letrado de Primera Instancia de 4º Turno de Mercedes, a cargo del Juez de Feria Dr. Nelson Rosa Rodríguez, a: Javier Alejandro Castillo Lapaz (foto izquierda) de 26 años y Julio César Fernández Sosa (foto derecha) de 24 años ambos como autores penalmente responables de un delito de hurto especialmente agravado en grado de tentativa y se les impuso una pena de siete meses de prisión a cumplir en forma efectiva.