Una programación que sufrió varias modificaciones producto de la situación sanitaria ya que muchos músicos, e incluso formaciones orquestales completas no pudieron llegar, o bien por la situación sanitaria, o por complicaciones en los vuelos aéreos. Pero eso no fue obstáculo para que los espectáculos reemplazantes, que debieron decidirse a último momento, fueran de igual o mejor calidad que los previamente estipulados. Tal el caso de la actuación de Leo Gasso trio, una formación armada a último momento y que sonó como si hubiera estado programado desde mucho tiempo atrás.
Leonel Gasso llegó a Mercedes con su bandoneón, pero en calidad de visitante, de espectador a disfrutar del festival y ante una de las ausencias armó un trio con Martín Acosta y Camilo Ottonelo, y sonaron como si hubieran tocado de toda la vida. Pero a su vez varios músicos locales, alumnos de la UTEC o de la Escuela de Música alternaron, o suplantaron a músicos que no pudieron estar en el festival con la misma soltura y calidad, sin que para nada se notara que fue un cambio de último momento, impuesto por las circunstancias. Es que en los últimos años se está generando en la ciudad, una generación de músicos, muy jóvenes casi todos, que ya es evidente imprimen una evolución musical en lo interpretativo y hasta en lo compositivo que es por demás prometedora.
Un festival Jazz a la Calle que no solamente está creciendo en lo artístico sino que promete ser recién un inicio de ese salto cualitativo en las propuestas artísticas.