En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer, ASSE presentó la actualización de su Protocolo que servirá de guía a los equipos de salud, en evento que contó con la participación de la Sra. Lorena Ponce de León, el Directorio de ASSE en pleno y la Directora de INMUJERES, Mónica Bottero.
El Presidente de ASSE, Leonardo Cipriani, destacó el compromiso de la institución con esta temática que catalogó de “epidemia”, que debe tratar primero a la víctima y también al agresor, cumpliendo un rol fundamental los equipos de salud mental.
En ese sentido, afirmó que son dos aspectos en los que pidió el mayor de los esfuerzos el Presidente de la República, Luis Lacalle Pou.
El jerarca manifestó que, a los efectos de jerarquizar el Equipo Coordinador Basado en Género y Generaciones creado en 2014, en diciembre de 2020 se conformó la Unidad de Violencia Basada en Género y Generaciones dependiente de la Gerencia Asistencial.
Valoró el trabajo realizado en todo el territorio nacional por la Unidad, fortaleciendo y/o conformando equipos destinados concretamente a esta problemática.
Cabe acotar que desde el 2021, el equipo de la Unidad comenzó a recorrer los diferentes territorios del país, debido a que cada uno posee una impronta distinta en cuanto a las manifestaciones de violencia y para poder conformar equipos referentes de violencia en donde no había y reforzar donde si había.
En los sitios recorridos se ha brindado capacitaciones diversas desde abordaje de situaciones en puerta de emergencia, sensibilizaciones, capacitación destinada a equipos referentes, entre otras.
Por su parte, la Coordinadora de la Unidad, Wanda Oyola, enfatizó que el Protocolo tiene un alcance nacional, ya que será distribuido en todas las unidades ejecutoras y servicios de salud y que es una herramienta que brinda una respuesta integral y de calidad a los usuarios en su proceso asistencial.
Su presentación busca la practicidad en el manejo del mismo y posee un lenguaje claro y preciso que puede ser interpretado por cualquier actor del proceso asistencial que no posea formación específica en la temática. Cada integrante del Equipo de Salud deberá dar la primera respuesta ante estas situaciones y posterior seguimiento.
El Protocolo permite delinear: sospecha y detección; diagnóstico y evaluación del riesgo de la situación; primeras acciones; seguimiento y acciones a largo plazo; denuncia como parte de la estrategia de trabajo y lineamientos de abordaje según los ámbitos de atención. Este último aspecto, refiere a violencia sexual, emergencia, internación, domicilio y policlínica.
Estos cambios en el Protocolo, se espera tengan un gran impacto en la calidad de atención que recibirá el usuario que se encuentra en este tipo de situaciones y se garantiza el efectivo goce de sus derechos.
Por su lado, la Sra. Lorena Ponce de León, subrayó la gran visibilidad que ha tenido este año la temática, además de incluir más acciones de prevención.
En ese sentido, valoró el trabajo desplegado desde ASSE e INMUJERES, y sostuvo que desde el Programa Sembrando, se busca la reinserción laboral de mujeres que han sufrido violencia.
Expresó que es necesario el “compromiso, amor y entrega” para levantar la cabeza y autoestima de las mujeres que sufren violencia, así como ayudar a los violentos/as con las herramientas terapéuticas, que aseguró es el camino para construir una sociedad mejor.
