Mucho trabajo tiene por estos días Zelmar Manzanares, el buen Director Técnico del Club Deportivo y Social Santa Catalina. Por un lado, sus dirigidos deben afrontar este miércoles la final contra Fraternidad de José Enrique Rodó, correspondiente al Torneo Apertura de la Liga Regional del Centro, y por otro deben prepararse para medirse con la Institución Atlética Sud América (IASA), campeón de Mercedes, en el marco de la segunda fase de la Copa Nacional de clubes campeones de la Organización de Fútbol del Interior (OFI).
La final contra Fraternidad tendrá lugar en el Parque Ariel de José Enrique Rodó y comenzará a las 21 horas.
Santa Catalina espera la pronta recuperación de algunos jugadores lesionados que no han podido estar a la orden de Manzanares, como el fraybentino Walter Ocampo o el zaguero central Alejandro Castro.
Para el campeón de la Liga del Centro ha sido todo un reto estar afrontando dos campeonatos simultáneamente, por todas las dificultades que ello acarrea.
Muchos de sus jugadores viven en otras localidades, como el golero mercedario Maximiliano Bianchi, el otro guardameta del plantel, Manuel Coello, que vive en Palmitas, Pablo Perazza, quien reside en Florencio Sánchez, o los delanteros Emiliano De León y Edison Marrero, quienes por razones laborales o de estudio están radicados en Montevideo, lo que significa que deban recorrer muchos kilómetros cada semana para entrenar o para participar de los partidos. Pese a esos obstáculos, Santa Catalina llegó a la final del Torneo Apertura de la liga regional y ganó en forma invicta la Serie D de la Copa de clubes campeones de la OFI. No es un hecho menor.
FOTO: Incidencia del partido Santa Catalina-Sportivo Barracas de Dolores, correspondiente a la última fecha de la Serie D, que fuera ganada de manera brillante por el equipo de la diagonal roja.