La detección de casos de COVID-19 en Uruguay hizo que se generara un ajuste repentino en las formas de interacción. La educación, como tantos otros ámbitos, tuvo que modificar el proceso de enseñanza y aprendizaje para reconvertirlo al espacio virtual. Las consecuencias de esto son aún objeto de estudio. Durante 2020 se registraron varios relevamientos de información para conocer, entre otros aspectos, la percepción de los actores educativos sobre ese año tan particular. Uno de ellos fue la encuesta sobre la situación educativa en el contexto de la emergencia sanitaria, realizada por la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) y dirigida a estudiantes y docentes de todos los niveles del ciclo obligatorio del sector público. Desde el INEEd también se compartió la inquietud por comprender la realidad de la educación en un escenario cambiante. Específicamente se llevaron a cabo dos iniciativas. Una de ellas fue la evaluación Aristas Primaria 2020 que, además de medir los distintos niveles de desempeño de los alumnos, recogió información de los maestros de tercero y sexto grado, y de los directores de las escuelas seleccionadas sobre la educación en pandemia. El segundo relevamiento se llevó a cabo entre los docentes y directores de la educación media. Las dos consultas realizadas por el Instituto consideraron tanto a los docentes que trabajan en el sector público como a aquellos que lo hacen en el privado, mientras que la de ANEP se aplicó únicamente a los del sector público. La encuesta a docentes de educación media se hizo entre octubre y diciembre de 2020, a través de un formulario en línea que fue completado voluntariamente por 2.686 docentes pertenecientes a 75 centros educativos de todo el país que integraron la muestra1. Las siguientes líneas esbozan algunas conclusiones del informe de resultados de la encuesta presentado recientemente por el INEEd.
¿Cómo percibieron las condiciones laborales los docentes de educación media?
Durante la suspensión de clases, el campo educativo se trasladó a los hogares de estudiantes y docentes. La irrupción del trabajo virtual en la esfera privada provocó la inexorable intersección con otras tareas, por ejemplo, las domésticas y de cuidados. Respecto a estas tareas y su concomitante carga durante la jornada laboral, los varones percibieron un aumento en comparación con un año normal. Sin embargo, esta proporción continúa estando muy por debajo de las cargas percibidas por las mujeres, quienes son, además, las que tuvieron mayores dificultades para compatibilizar la vida privada con el trabajo docente en este período. Asimismo, la percepción de sobrecarga y los sentimientos de soledad, miedo, angustia o desborde también presentaron un sesgo por género, observándose en mayor medida entre las mujeres. En términos de condiciones laborales, los docentes del sector privado fueron los que más se vieron perjudicados, tanto por una mayor proporción de despidos y seguros de paro, como por una mayor percepción de disminución de sus ingresos en el hogar. Sobre los recursos materiales y organizacionales para cumplir con el trabajo durante la suspensión de clases y el reintegro a la presencialidad, no se observaron grandes diferencias entre los consultados de los distintos sectores y subsistemas. La conectividad a internet y los recursos tecnológicos, así como el apoyo desde la dirección de los centros y los colegas, han sido aspectos evaluados positivamente por la mayoría de los docentes. El cumplimiento de los protocolos también presenta amplia satisfacción, con menores niveles de suficiencia con relación al número de auxiliares de servicio en secundaria pública y técnica para llevar a cabo el protocolo de limpieza. En cuanto a los recursos personales para afrontar la virtualidad, la mayoría de los docentes se sintieron preparados para el uso de tecnologías de la información y la comunicación; adaptar las clases a la modalidad virtual, y apoyar el aprendizaje a distancia. Si bien estos guarismos sobrepasan el 50% en todos los casos, los de secundaria pública se percibieron menos preparados que los de secundaria privada, con una diferencia de casi 20 puntos porcentuales.
¿Cuál fue la percepción sobre el trabajo con los estudiantes?
La preocupación por el sostén del vínculo y la continuidad pedagógica han sido aspectos que marcaron el año lectivo 2020, más que cualquier otro anterior. Según la percepción de los docentes, los estudiantes del sector público tuvieron menos exposición al tiempo pedagógico, así como una menor participación en los encuentros virtuales y menos cumplimiento de las tareas. Los encuestados de este sector también percibieron una menor asistencia de sus estudiantes al momento del retorno a la presencialidad, respecto a la percepción de sus pares del sector privado2. Con una brecha menor, también se observó una diferencia entre lo declarado por los docentes de Montevideo y los del interior, siendo los estudiantes montevideanos los que se encuentran en peor situación. La motivación de los estudiantes fue la principal dificultad para sostener los procesos de enseñanza y aprendizaje según los docentes, seguida por las dificultades de las familias para acompañarlos en la educación a distancia. La conexión a internet y el mantenimiento de los recursos tecnológicos no se encuentran entre los mayores problemas percibidos por los docentes. El uso extendido de plataformas del Plan Ceibal (en mayor medida en el sector público) y el de otras plataformas (particularmente en centros privados) fueron complementados con vías de comunicación como WhatsApp. Estas herramientas fueron utilizadas tanto con una función pedagógica, para establecer actividades o evaluaciones, como para mantener el vínculo entre los docentes y de estos con los estudiantes y, en menor medida, las familias de estos. Estas situaciones afectaron el logro de los alumnos. Casi un 60% de los docentes expresó dificultades para lograr que la mayoría de los estudiantes incorporara los conocimientos básicos para el grado. Asimismo, un 74% dijo que sus estudiantes habían avanzado un poco menos o bastante menos que otros años. Estos tiempos de pandemia dejan un gran desafío respecto a cómo lograr sostener la continuidad pedagógica para que todos los estudiantes puedan avanzar en igualdad de oportunidades. El INEEd continuará realizando estudios para relevar información útil para afrontar ese desafío.
Notas
1-Esto representó un 61% de los docentes invitados a participar. Los docentes de educación técnica fueron los que tuvieron mayor adhesión al estudio (68%), seguidos por los de secundaria privada (67%) y los de secundaria pública (52%).
2-Un 40% de los docentes de educación técnica y un 25% de los de secundaria informa que la cantidad de alumnos que retomó a clase cuando volvió la presencialidad fue la mitad o incluso menos. En el caso del sector privado esta situación la informa solo el 2% de los docentes.
(*) fuente: INEEd. (2021). La pandemia de COVID-19 desde la percepción de los docentes de educación media (Boletín agosto 2021)