El 16 de julio se realizó el seminario virtual “Cooperativas agrarias como generadoras de desarrollo local” organizado por Cooperativas Agrarias Federadas (CAF), la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración (Udelar) y el Instituto Nacional de Cooperativismo (INACOOP).
Se presentaron los resultados de dos recientes trabajos académicos que analizan de qué forma el cooperativismo agrario contribuye a los procesos de desarrollo local, abarcando la dimensión económica, social y ambiental.
Participaron autoridades institucionales: Pablo Perdomo (presidente de CAF), Rodrigo Arim (Rector de la Universidad de la República), el decano de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración, Jorge Xavier y Martín Fernández (presidente de INACOOP); representantes internacionales, cooperativistas, docentes y estudiantes de diferentes centros de estudio.
Las autoridades hicieron hincapié en que las comunidades locales requieren de agentes dinamizadores que estén presentes en el territorio para su desarrollo sostenible en el tiempo. Las características organizativas de las cooperativas permiten la creación y desarrollo de redes de cooperación a nivel productivo, social, institucional y ambiental, además de ser agentes económicos. En este sentido, es que se da a conocer la contribución del cooperativismo agrario a los procesos de desarrollo local.
Rodrigo Arim, Rector de la Universidad de la República señaló la importancia de que desde la Facultad de Ciencias Económicas y Administración tienda puentes entre lo académico y el bienestar social del país, hacia el desarrollo de cada uno de sus rincones.
Habló sobre la construcción de una agenda de investigación a largo plazo para generar conocimiento valioso que sostengan las políticas públicas en esta materia.
Culminó expresando que “pensar en clave de futuro es pensar en clave de desarrollo, y pensar en clave de desarrollo es entender la lógica de la interacción entre distintos actores instituciones, sociales y académicos para generar un desarrollo que nos permita potenciarnos como sociedad en conjunto”.
Por su parte, Martín Fernández, presidente de INACOOP señaló que “las cooperativas agrarias tienen referentes indiscutidos en el sector agropecuario de este país. Copagran, Conaprole o Central Lanera Uruguaya son claros ejemplos de la importancia que reviste el cooperativismo en el sector agropecuario como agente de desarrollo local”.
También hizo referencia a “la agricultura familiar”, e indicó que la misma representa en nuestro país la mitad de los establecimientos rurales. “Las cooperativas agrarias federadas son el 32 % de la totalidad de los mismos y eso marca la importancia que tienen en el territorio”. A modo de datos que ejemplifican la importancia de tales cooperativas, Fernández señaló que las cooperativas agrarias reúnen el 50 % del almacenaje de granos.
Sostuvo que estas cooperativas son determinantes para el desarrollo local y para la permanencia de las familias en el medio rural. Agregó que “significan una herramienta imprescindible para conseguir economía de escala para muchos pequeños productores. Productores de pequeñas parcelas hasta exportadores al mundo”.
Culminando sus palabras, Fernández agregó que “el desarrollo territorial necesita políticas públicas activas y desde IINACOOP se asumió el compromiso de estar muy cerca de todo lo que significan los agentes de desarrollo territorial”. Indicó que “las cooperativas agrarias son verdaderos agentes de desarrollo, generan un entramado social en la localidad, muchas veces como agentes principales”.
Resaltó también el compromiso real que éstas tienen con el medio ambiente y con la formación permanente para seguir continuamente mejorando la gestión.
Por su parte, Pablo Perdomo, presidente de Cooperativas Agrarias Federadas (CAF) resaltó la importancia del trabajo conjunto entre la academia, el sector productivo y la institucionalidad.
“Las cooperativas agrarias están basadas en principios y valores cooperativos. Son una herramienta idónea para mejorar la competitividad de productores de pequeña y mediana escala, contribuyendo a su sostenibilidad en el tiempo”.
Concluyó que “las cooperativas son empresas formales que ofrecen garantías. Somos auditados anualmente por la auditoria interna de la nación, pero también somos auditados socialmente en el territorio, estamos muy arraigados en lo local”.
Estudios académicos presentados
El primer estudio presentado, denominado “La contribución del cooperativismo agrario al desarrollo territorial: Hallazgos a partir de casos en Chile y Uruguay” se enmarca en la cooperación entre CAF y el Instituto de Economía de la FCEA en una línea de trabajo conjunto para generar conocimiento en la temática.
Analiza las prácticas y visiones de los socios que conforman dos cooperativas de Chile y Uruguay, y estudia de qué manera contribuye el cooperativismo agrario al desarrollo territorial en torno a cuatro ejes: productiva, social-comunitaria, político-institucional y participación-movilización.
Los autores del estudio, Adrián Rodríguez Miranda de la FCEA y Sofía Boza de la Universidad de Chile, concluyen que la cooperativa uruguaya se muestra más interesada a ser parte de los agentes que transformen el territorio donde se sitúan, mientras que la cooperativa chilena no tiene el mismo grado de vinculación con el territorio. Los resultados de este estudio plasman la conformación de una interesante agenda de investigación sobre las relaciones entre cooperativismo, desarrollo territorial y políticas públicas.
El segundo estudio: “Cooperativismo agrario y desarrollo territorial rural: Dos caminos que se encuentran” de Alejandra Caballero y Facundo Grampín sistematiza la experiencia de las cooperativas asociadas a CAF desde el enfoque del desarrollo territorial rural.
Los investigadores concluyen que existe predisposición de las cooperativas para participar y generar alianzas y redes de cooperación. Las cooperativas agrarias realizan prácticas que sintonizan con los procesos de desarrollo local. Casi la totalidad se visualizan como referentes en el territorio, tanto en términos económicos como sociales. Motivos por los cuales se ven a sí mismas como referentes, así como lo expresan en entrevista con los autores: “hemos desarrollado valores en la sociedad que nos hacen referentes en la zona, tanto a nivel empresarial como a nivel social”.
Según este estudio las cooperativas agrarias, tiene para el futuro el desafío de empoderarse como actores que contribuyen significativamente al desarrollo local en el medio rural y las pequeñas ciudades vinculadas a la producción agraria.
ESStudioteca
El evento fue una oportunidad para presentar un nuevo espacio en la biblioteca virtual de INACOOP. El Instituto comenzará a publicar una serie en formato digital que visibiliza los trabajos finales de estudiantes del Posgrado en Economía y Gestión para la Inclusión, de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración de la Universidad de la República (FCEA-UDELAR), y otras investigaciones que amplían el acervo académico sobre diversas temáticas vinculadas al cooperativismo y a la economía social.