(Por Enrique Lécaille) Las dos últimas presentaciones que el mercedario Ricardo Villalba acaba de realizar en su ciudad natal, en el Club de Remeros y en Praga, nos permitieron hablar con él más allá de su conocida y muy exitosa trayectoria desarrollada en el mundo de la canción. Apartándonos un poco de su vida artística, hablamos un poco de su pasado en las canchas mercedarias, algo que pocos recuerdan, porque su actividad futbolística se limitó a las divisiones inferiores.
“Yo comencé jugando en el baby-fútbol”, nos aclara, cuando le comentamos que aun conservamos en nuestra memoria algunas imágenes de sus actuaciones en el equipo de la Tercera División del Club Independiente.
-¿En qué club, Ricardo?
“En Sendas. Yo jugué en ese cuadro en la época que lo dirigía el “Tío” Cabrera. Después pasé al baby-fútbol de Independiente, hasta pasar a la Cuarta y a la Tercera. Ahí estuve algunos años. Fue una época maravillosa, que tengo muy presente”.
-Jugabas en el mediocampo, si mal no recordamos…
-“Sí, es verdad, siempre de centro-half, aunque, a decir verdad, era malo. No tenía madera para eso. Me ponían por una cuestión de amistad (no puede evitar reírse, por su ocurrencia)”.
-¿Recuerdas los entrenadores que tuviste en Independiente?
“Sí, tuve de técnico a Eduilde Viera y también a Cándido Perdomo. En el baby-fútbol había tenido a "Yoyó" Martínez”.
-¿Y qué compañeros recuerdas de esa época en las divisiones inferiores?
“Ufff… éramos un montón de muchachos. Recuerdo que estaban los Álvarez, los Correa (Juan Antonio y el “Sapo”), Tejera, Mario Rivero, Gilberto Cheloni, Noel Villalba, Milton Taruselli y Federico Marotta, que hace poco me envió una foto de Independiente, desde España. Fueron muchísimos compañeros y tengo gratos recuerdos”…
-¿Ya hacías algo de música, en ese momento?
“Sí, ya alternaba el deporte y la música. En realidad yo había comenzado a cantar desde niño, con mi tío Osvel Villalba. Hacía folklore. Después estuve en un conjunto que se llamaba Los Chanáes, con los hermanos Rivas, cuando yo tendría catorce años, más o menos. Más tarde pasé por Patria y Tradición y también por Brumas, en sus inicios, entre otros conjuntos”.
-¿Y cuándo fue que te acercaste al carnaval?
“Eso fue en 1979. Ahí me integré a Los Diablos Verdes”.
-¿Quién era el Director de la murga?
“Cuando empecé, estaba el “Divino” Modernell. Después vino “Maravilla” Castro, en 1981, si no me equivoco”.
-¿Cuántos años llevas ya en Montevideo?
“Me fui en el 90”.
-¿Y ahora, cuando vienes a Mercedes, como en estos días, crees que el público mercedario tiene un reconocimiento especial hacia tu persona y a tus condiciones artísticas, considerando todo lo que has logrado en tu carrera, como por ejemplo haber sido distinguido como la mejor voz del carnaval uruguayo?
“Mirá, yo le tengo tanto que agradecer al público de Mercedes que no me alcanzarían las palabras para hacerlo, me quedaría corto. El afecto que me ha demostrado mi público es algo que yo no puedo agradecer con palabras”.
-¿Sigues teniendo amigos en Mercedes?
“Sí, por suerte sí. Continúo teniendo una enormidad de amigos. Por eso quisiera venir con más días, para pasear y verme con toda la gente que aprecio, pero me ha sido imposible, por mis compromisos. De todas formas, yo a Mercedes lo llevo en el corazón”.