El proyecto surge como una iniciativa del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social y propone que todo trabajador, tanto del ámbito público como del privado, tendrá derecho a un plazo máximo de cuatro horas para concurrir al centro de vacunación, en caso de que haya sido agendado para acudir dentro de su horario laboral.
En caso de que la vacunación requiera de dos dosis, se aplicará el máximo de cuatro horas para ambas jornadas.
El trabajador que concurra a vacunarse deberá avisar a su supervisor y tendrá tres días luego de la segunda dosis para justificar su cumplimiento.
La ley también abarca a aquellos trabajadores que se hayan vacunado previo a su sanción, siempre que sea justificado ante su empleador.
Ahora el proyecto de ley volverá al Poder Ejecutivo para su promulgación.