Este jueves, en el marco del 60º aniversario de la creación de la Diócesis, Monseñor Carlos María Collazzi, Obispo Diocesano de Mercedes, realizó su mensaje de cara a la Navidad, como lo hace anualmente.
Collazi comienza expresando en su mensaje "hoy y siempre los cristianos cantamos con alegría: “viene nuestro Dios”. Su palabra nos ha dicho en estos días: ¡Alégrense siempre en el Señor… El Señor está cerca! (Fil.4,4-5) Tan cerca está, que ¡está con nosotros!
Cantamos llenos de esperanza: ¡Despierten los hombres, los de cansado corazón ya no tienen que temer, cerca está la salvación!".
Señala "cada Navidad celebramos: “hoy en la ciudad de David, nos ha nacido el Salvador” (Lc. 2,11) En este tiempo de pandemia, con desafíos y realidades nuevas que nunca siquiera habíamos pensando íbamos a vivir, nuestro canto de alegría se basa en el amor del Padre que nos envió a su Hijo Jesucristo para salvarnos.
Su vida entregada, nos hace pasar de la tristeza al gozo, de lo absurdo y contradictorio al hondo sentido de la vida; del cansancio y desaliento a la esperanza que no defrauda; de las divisiones y fragmentaciones al cultivo del valor de la unidad; de las luchas y rencores a la madurez de levantar las miradas para no dejarnos atrapar por visiones apasionadas y del momento".
Para Collazi "esta alegría no es un sentimiento artificial, no es un estado de ánimo que pasa. Está basada en la certeza de la presencia de Dios junto a su pueblo. Un pueblo que además se da cuenta de su fragilidad, precariedad y que no puede depositar el corazón en cosas efímeras.
Un pueblo invitado a encontrar sus seguridades en Dios y que dice a diario haciendo sus proyectos “si Dios quiere!!!”.
Sostiene el Obispo de Mercedes "la alegría es fruto del espíritu recibido en el encuentro con Jesucristo, a quien reconocemos como el Hijo de Dios encarnado y redentor; y que deseamos y por ello trabajamos para que llegue a TODOS. Especialmente a los cansados, aflijidos, a los que están solos, tristes, a los que sufren, a los que están al borde de tantos caminos, a los que dicen no creer".
En esta nueva Navidad, añade Collazzo, que reconoce, "distinta a todas, donde estaremos más en casa, en la intimidad de la familia, donde experimentamos un fuerte llamado al interior del corazón para vivir todo tiempo, como tiempo de Dios.
En el mensaje que los Obispos le dirigimos desde el Santuario de Florida, expresamos: “Siempre es tiempo de Dios; tiempo donde Él nos manifiesta su amor y su presencia en diferentes formas. Siempre es tiempo donde es posible el amor. Siempre hay un gesto, un servicio, un acto de amor que podemos hacer por los demás” (Mensaje ,17)
Que surjan los gestos concretos, creativos y distintos de cercanía para con todos los hermanos. Los saludos tendrán que ser diferentes. La fiesta más intima en casa. Siempre solidarios con los que menos tienen y sensibles para con las familias afectadas por la pandemia".
El mensaje concluye manifestando pensando en lo que se viene, "un año 2021 de compromisos cristianos; escucha de la palabra, oración, fraternidad y expresiones de solidaridad, y así la luz de Cristo disipará toda oscuridad y tiniebla.
Santa María de las Mercedes, nos acompañe y enseñe a cantar con alegría la grandeza del Señor y como Madre nos reúna en la Familia de Dios que es la Iglesia. Con mi Bendición...".