
El magistrado actuante determinó el procesamiento con prisión por dos delitos de hurtos especialmente agravado y un delito de atentado, del joven de iniciales A.N.H.R. de 21 años, que fuera procesamiento sin prisión por un delito de hurto especialmente agravado y 48 horas después realizó los otros robos y cuando los policías fueron a detenerlo la emprendió contra el móvil de Jefatura de Policía causándole daños.
Según informó la Jefatura de Policía de Soriano, en actuaciones cumplidas por Seccional Primera con apoyo del GEPO se condujo desde zona céntrica a un joven de 21 años, poseedor de antecedentes, el cual fuera sindicado como responsable de hurto en un auto estacionado en la zona previo violentarle una de sus puertas, incautándosele una campera sin uso marca “Conde Blue”, una campera joggings marca “OXX Absolute” y un celular Nokia.
A su vez, en el transcurso de las investigaciones formalizaron denuncia por el hurto de una cámara digital marca “Canon”, avaluada en $ 15.000, desde auto Fiat Uno, Mat. IAB- 5219, estacionado en 28 de Febrero casi Ferreria, mediante forzamiento de una puerta, habiendo sido recuperada dicha cámara por el damnificado en persecución que le efectuara al delincuente, previo a su detención.
Prosiguiendo las actuaciones se presentó en la dependencia policial un hombre mayor de edad, radicando denuncia por el hurto del celular Nokia incautado desde el interior de camioneta estacionada en zona céntrica con los vidrios bajos, avaluando en $ 2.000; por otra parte se presentó responsable de comercio céntrico radicando denuncia por hurto de la campera marca “OXX Absolute” desde el interior del local, avaluando en $ 1400.
Ante el registro de todos estos hurtos, se dio intervención a Policía Técnica y trámite a la Justicia, continuándose las actuaciones por sus carriles correspondientes.
Estas finalizaron este lunes con el procesamiento antes mencionado por los hurtos y atentado contra el móvil policial. Cabe señalar que el joven es adicto a la pasta base, seencuentra en situación de calle y en el procesamiento realizado 48 horas antes de los demás hurtos, la Justicia le había determinado la obligación de realizar tratamiento de su adicción de lo contrario marcharía a la cárcel. En definitiva ingresó a la cárcel pero no por incumplir aquella medida sino por seguir hurtando.