“Hoy a 47 años del golpe de Estado, el fascimo ha encontrado una forma de colarse nuevamente en nuestra democracia como lobos disfrazados de corderos, nostálgicos de otras épocas y queriendo limitar nuestros derechos” dijo la Presidenta del Plenario Intersindical de Soriano. En la jornada en que se recuerda el 47 aniversario de la Huelga General con la cual el pueblo uruguayo resistió al golpe de Estado, Carolina Silva leyó la proclama del Plenario del Interior del PIT CNT, refiriéndose a la realidad política actual. “Hoy a través de una Ley de Urgente Consideración el gobierno pone sobre el tapete la limitación al derecho a la huelga, habilita la represión a través de las fuerzas del orden y libra la potestad de declarar ilegales algunas manifestaciones. Nosotros como movimiento sindical, como expresión del pueblo uruguayo le decimos que no estamos dispuestos a dar ni un solo paso atrás en nuestros derechos, en nuestras libertades y que estaremos a la talla para dar la lucha desde todos los ámbitos posibles”.
El texto completo de la proclma del Plenario del Interio del PIT CNT es el siguiente:
El 27 de junio de 1973, no fue un día más en la historia de los uruguayos y uruguayas. Ese día, el Presidente Juan María Bordaberry decreta la disolución de las Cámaras y la instalación de un Consejo de Estado dando comienzo a una de las épocas más oscuras y sangrientas de nuestra historia.
La CNT en el 64, había resuelto que de efectivizarse el golpe, se iría a la huelga general con ocupación de los lugares de trabajo, resolución ratificada en todos y cada uno de sus congresos y finalmente llevada a cabo en la madrugada del 27 de junio en el local de la Federación del Vidrio y ratificada más tarde ese mismo día en la asamblea realizada en la textil La Aurora en el Paso Molino.
Inmediatamente los dirigentes sindicales integrantes de la Dirección de la CNT pasaron a la clandestinidad y el 30 de junio el gobierno publica la lista de 51 nombres y las fotos de los sindicalistas requeridos.
Entre los cinco puntos que reclamó la central única, incluyó el inmediato restablecimiento de las libertades públicas y los derechos constitucionales. La Universidad de la República y los estudiantes nucleados en la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay (FEUU) se plegaron al reclamo de inmediato.
“La dictadura, que nació huérfana de todo apoyo popular, reprimió durante las demostraciones y manifestaciones callejeras, militarizó a los trabajadores estatales, puso fuera de la ley a la central y a sus dirigentes, tratados como criminales y delincuentes. El Cilindro Municipal, por entonces el estadio cerrado más grande del país, se transforma en una cárcel para albergar a los cientos de sindicalistas, estudiantes, periodistas e intelectuales que habían caído presos en el golpe de Estado”
El Movimiento Sindical decidió la reorganización inmediata de las ocupaciones luego de los desalojos, llevando a cabo volanteadas y pintadas. Realizando el acto simbólico de apagar la llama de la refinería de ANCAP, demostrando al pueblo, a la prensa nacional y al mundo entero que la unidad de la clase trabajadora no había sido vencida. Como contraparte, la política represiva desplegada dejó como saldo cientos de detenidos, torturados, heridos y dos trabajadores asesinados.
Ahora bien, lo descripto es parte de la historia. Historia que no debemos olvidar, enumeración de hechos dolorosos que quedaron grabados en nuestra memoria. Pero el significado de esta Huelga General traspasa la enumeración de hechos y las realidades que vinieron con la larga noche de la Dictadura Cívico-Militar.
Esta Huelga General del 27 de junio de 1973 fue un hito de lucha, marcada a fuego en el pueblo uruguayo. Y para ser justos, es necesario abordar esta historia desde el trabajo, desde la perspectiva de los actores principales, los trabajadores, los estudiantes y sus organizaciones, que no dudaron en dar la vida si era necesario, para defender la libertad. La bandera ideológica fue la unidad, de sacrificios colectivos por encima del individualismo, para vencer las injusticias imperantes. Es una historia de triunfos y derrotas, que permitieron generar las bases para un futuro democrático. Simultáneamente en que se apagó la llama de ANCAP, se prendió la llama de la esperanza de una patria mejor.
Hoy, a 47 años del Golpe de Estado, el fascismo ha encontrado una forma de colarse nuevamente en nuestra democracia, como lobos disfrazados de corderos, nostálgicos de otras épocas y queriendo limitar nuestros derechos.
Hoy, a través de una Ley de Urgente consideración el gobierno pone sobre el tapete la limitación del derecho a la huelga, habilita la represión a través de las fuerzas del orden y libra la potestad de declarar ilegales algunas manifestaciones.
Nosotros, como Movimiento Sindical, como Intersocial, como expresión del pueblo uruguayo les decimos que no estamos dispuestos a dar ni un solo paso atrás en nuestros derechos, en nuestras libertades y que estaremos a la talla para dar la lucha desde todos los ámbitos posibles.
Porque como dijo Antonio Machado “En los trances duros, los señoritos invocan a la Patria y la venden; el Pueblo no la nombra siquiera, pero la compra con su sangre y la salva”.
Hoy más que nunca, que viva la democracia, que viva la libertad, que vivan los estudiantes, los trabajadores y el pueblo, y que todos unidos gritemos bien fuerte NUNCA MÁS TERRORISMO DE ESTADO, NUNCA MÁS DICTADURA y dejemos demostrado que EL PUEBLO UNIDO JAMAS SERA VENCIDO.
Salú!!.