En contacto con uno de los integrantes del movimiento de pescadores artesanales de la zona de Playa de la Agraciada, @gesor habló con Miguel Pacheco, quien abordó el tema de por qué se oponen a la ubicación del emprendimiento aceitero de la empresa Cereoil S.A. en esta lugar del departamento de Soriano. 

En este sentido, Pacheco comenzó relatando que: "antes cuando no teníamos nada para hacer eramos bagayeros, pero cuando tuvimos la tuvimos la oportunidad de comenzar a vincularnos a la pesca lo hicimos". Contó que "a partir de lo que le pasó a uno de los muchachos (procesado por contrabando), fue una sopresa para nosotros, porque a pesar de que lo conocíamos nunca estuvo en el movimiento nuestro, además él nunca nos apoyo", destacó el entrevistado por nuestra Agencia de Noticias. 

"Nosotros lo que precisamos acá es el lugar, recién me dijeron que el Intendente (Besozzi) hizo mención a un tema relacionado a la solución de vivienda, pero en realidad ningún pescador está pidiendo vivienda, y si alguien le pide eso no es pescador. Nosotros lo que precisamos es el lugar estratégico para las embarcaciones, para trabajar y para poder desarrollar nuestra actividad, por eso decidimos movilizarnos para que no se venda este lugar". 

Pacheco expresó que si el emprendimiento llegara a instalarse esa acción perjudicará a los pescadores, dando cuenta que en ese lugar hay unas 36 embarcaciones, nucleando a alrededor de 100  personas que se dedican a la pesca legal en esa zona del departamento. 

Remarcó que son unas 90 familias las que están viviendo de la pesca en Playa de la Agraciada, "entonces si el Intendente nos quiere buscar una solución, por qué el emprendimiento no se instala en una zona más arriba", se preguntó Pacheco. 

"Lo que pasa es que la mayoría somos de Palmira, y ese es el principal problema que tienen con nosotros, pero somos pescadores y somos uruguayos", enfatizó.

Para Pacheco, "la solución está en un terreno que se encuentra en una zona más arriba", no entendiendo la razón por la cual las autoridades no acceden al terreno que cedería el Instituto Nacional de Colonización.