Se llevó a cabo este viernes una nueva audiencia en el Juzgado Letrado de Primera Instancia de Primer Turno, a cargo de la Dra. Carolina Olivera (foto 1), Jueza subrogante, asistida por la receptora Natalia Turuani, en audiencia que fue solicitada por la Fiscalía de Primer Turno representada en la oportunidad por su titular Dr. Carlos Chargoñia y la Fiscal Adscripta Dra. Stella Alciaturi, que fue quien llevó adelante la investigación que inicialmente la comenzñño la entonces Fiscal Dra. María Eugenia Rodríguez, estando en sala también la Defensora Pública Dra. Eliana Miegge (foto 2), asistiendo a los tres imputados: Germán Eduardo Otero Granja, Tatiana Pamela Fernández Bergalo, Hugo Damián Correa Torres, en la causa que por asociación para delinquir y reiterados delitos de estafas le venía siguiendo la Fiscalía.
INFORME DE FISCALIA
La Fiscalía informó que de la investigación llevada a cabo entre marzo 2018 y la actualidad, el imputado Germán Eduardo Otero Granja, que se encuentra recluido en el Penal de Libertad, participó directamente en la comisión de alrededor de 400 delitos de estafa de los cuales se consumaron aproximadamente 150 y los demás fueron tentados utilizando diferentes modalidades.
Usando teléfonos celulares con tarjetas diversas se comunicaba con propietarios y, o empleados de diferentes comercios ubicados en todo el país, refiriendo ser un funcionario policial de jerarquía de la zona, que se encontraba haciendo relevamiento de datos a fin de coordinar acciones por motivos de seguridad.
De esta forma lograba que los interlocutores, le brindaran datos personales, tales como nombre completo, domicilio, cédula de identidad y otros datos referentes al comercio.
En alguna ocasión, además, preguntaba a estos si hacían recargas de servicio telefónico y obtenía que se le recargara el servicio, asegurándose que las mismas incluyeran servicio de datos móviles. De la misma forma solicitaba que se efectuaran recargas para la coautora Tatiana Fernández Bergalo.
Posteriormente, y a partir de la información recibida, se comunicaba con locales de Abitab o Redpagos cercanos a diferentes comercios, y haciéndose pasar por los comerciantes propietarios de los mismos, les solicitaba que hicieran giros de dinero o recargas telefónicas que, según expresaba, más tarde pasaría a pagar.
En algunas ocasiones lograba que los empleados del local hicieran los giros de dinero, incluso varios en la misma tarde y por sumas de dinero importantes, ya que era una operativa corriente en la relación de las empresas con los clientes que el imputado simulaba ser.
Mediante llamado telefónico, también se comunicaba con propietarios de diferentes tipos de comercios vinculados a la actividad gastronómica, que incluían la gama más variada, desde hoteles cuatro estrellas hasta fabricantes de churros, identificándose como director de Higiene de la Intendencia Municipal correspondiente o director de Bromatología de la IMM; en cada caso mencionaba el nombre de la persona que ocupaba realmente ese cargo, quien decía ser, y refería a las víctimas que había ingresado una denuncia de un usuario que había sufrido trastornos alimenticios graves por causa de haber ingerido un alimento en mal estado adquirido en el local, les interrogaba acerca de la vigencia de los carnés de manipulación de alimentos de sus empleados, habilitaciones, y otros aspectos relacionados a los controles exigidos, y ofrecía realizar gestiones a fin de evitar la multa, regularizar la situación del local y obtener las habilitaciones necesarias para trabajar con tranquilidad los próximos tres o cinco años, a cambio de lo cual, las víctimas tenían que girar dinero, para timbres y para la gestora.
En una investigación llevada a cabo por esta Fiscalía en relación a aproximadamente 400 delitos hechos denunciados, el imputado logró que unas 150 víctimas realizaran los pagos, giros y depósitos exigidos totalizando $ 1.265.916, mientras que alrededor de 200 de las maniobras no superaron la etapa de conato, en virtud que las víctimas no accedieron a la exigencia de dinero y radicaron las denuncias correspondientes.
El dinero era recibido a través de giros de Redpagos, depósitos en tarjetas Mi Dinero, giros Abitab, que recibían alrededor de 50 "cybermulas", esto es, personas que se encargaban de cobrar el dinero obtenido en la maniobra a cambio de alguna prestación o en algunos casos, porque sufrían amenazas respecto de su seguridad o de la seguridad o la vida de sus familiares presos.
De la investigación surge además claramente el vínculo de varias de estas personas entre sí, algunas eran integrantes de una misma familia, otras residían en el mismo domicilio o barrio, y varias de ellas cuentan con familiares recluidos en el mismo establecimiento penitenciario que Otero.
Tanto Otero Granja como la coimputada Fernández Bergalo, reconocen que, en algunas oportunidades, que se sitúan en los meses de octubre y noviembre de 2018, Tatiana Fernández Bergalo, reunió el dinero proveniente del cobro de giros realizados por aproximadamente tres de las "cybermulas" y, posteriormente, se reunía en diferentes lugares de la vía pública, con personas, que dice no conocer, que llegaban en moto, y que eran las encargadas de llevar el dinero a su destinatario final.
Reconoce asimismo que se vio involucrada en la maniobra por decisión de quien por entonces era su pareja, Hugo Damián Correa Torres, quien se encuentran recluido en el establecimiento penitenciario INR3 (Penal de Libertad).
Una vez en sede de la Fiscalía el imputado admite los hechos que se le atribuyen.
La Fiscalía solicitó se condene a GERMAN EDUARDO OTERO GRANJA como autor penalmente responsable de un delito de asociación para delinquir especialmente agravaado en concurrencia fuera de la reiteración con reiterados delitos de estafa a la pena de cinco años de penitenciarìa de cumplimiento efectivo; a TATIANA PAMELA FERNANDEZ BERGALO como autora penalmente responsable de un delito de asociación para delinquir en concurrencia fuera de la reiteración, con reiterados delitos de estafa, a la pena de dos años y cuatro meses de penitenciaría, a cumplir el primer año en régimen de prisión efectiva y los 16 meses restantes en régimen de prisión domiciliaria; a HUGO DAMIAN CORREA TORRES como autor penalmente responsable de un delito de asociación para delinquir especialmente agravado en concurrencia fuera de la reiteración con reiterados delitos de estafa en calidad de coautor a la pena de tres años de penitenciaría de cumplimiento efectivo.
A su vez se disponga el embargo y comiso sobre los bienes que pudieren existir de los imputados librándose comunicación urgente a la Dirección Nacional de Registros Públicos.
FALLO:
Finalmente la Dra. Carolina Olivera, en consonancia con los solicitado por la Fiscalía a través de la Dra. Stella Alciaturi emitió la sentencia condenando a Germán Eduardo Otero Granja como autor penalmente responsable de un delito de asociación para delinquir especialmente agravado en concurrencia fuera de la reiteración con reiterados delitos de estafa a la pena de cinco años de penitenciaría de cumplimiento efectivo; condenando a Tatiana Pamela Fernández Bergalo como autora penalmente responsable de un delito de asociación para delinquir en concurrencia fuera de la reiteración con reiterados delitos de estafa a la pena de dos años y cuatro meses de penitenciaría, a cumplir el primer año en régimen de prisión efectiva y los 16 meses restantes en régimen de prisión domiciliaria; condenando a Hugo Damián Correa Torres como autor penalmente responsable de un delito de asociación para delinquir especialmente agravado en concurrencia fuera de la reiteración con reiterados delitos de estafa en calidad de coautor a la pena de tres años de penitenciaría de cumplirmiento efectivo.
A su vez dispuso el embargo y comiso sobre los bienes que pudieran existir de los condenados Germán Eduardo Otero Granja y Hugo Damián Correa Torres.