FEMI manifiesta su preocupación ante el planteo de recomenzar las clases en las escuelas rurales, y comparte lo expresado por la Sociedad de Medicina Rural del Uruguay en todos sus términos.
Tupambaé, 9 de abril de 2020
La Sociedad de Medicina Rural del Uruguay (SOMERUY) ante la decisión de recomenzar las clases en las escuelas rurales (exceptuando el departamento de Canelones) ha resuelto hacer llegar a las autoridades nacionales, en el marco de nuestro deseo de colaborar en el esfuerzo de todos dirigido a disminuir el impacto de la pandemia de SARS-COv-2, las siguientes consideraciones basadas en nuestro conocimiento en territorio.
Compartimos la necesidad de comenzar el camino hacia la normalidad, al igual que la importancia de la educación para todos los niños, en especial a los del Uruguay olvidado.
También comprendemos que se comience por el Uruguay donde la solidaridad y el cumplimiento de las normas de adecuado comportamiento es mayor que en el resto del país.
Es adecuado que se comience por los lugares donde la densidad poblacional es baja y que por las características de las actividades productivas, no ha detenido su actividad ya que se realizan en su hogar, al aire libre y sin necesidad de aglomeraciones.
Pero, tengamos en cuenta que:
La gran mayoría de los docentes deben trasladarse desde la zona urbana donde residen hacia las zonas rurales donde ejercen. Lo cual aumentaría los riesgos de contagio viral en una zona donde los servicios de salud no abundan.
La apertura de las escuelas rurales, aumentaría la movilidad de los niños, docentes y padres, con lo cual estaríamos contribuyendo a la circulación comunitaria del virus y al fracaso del trabajo de educación en salud realizado por el personal de salud rural en el marco de la Campaña “Quedate en Casa”.
Recuerden que menos del 6% de los médicos uruguayos vive y asiste al Norte del Rio Negro y teniendo en cuenta que en el Sur no es mejor (18%) y que en una gran cantidad de poblaciones de menos de 3.500 habitantes, existe un solo médico y no cuenta con más de dos o tres unidades de enfermería. A lo sumo viven dos choferes de ambulancia (con las dificultades que eso conlleva). Y el personal de salud no es inmune al contagio y en esos medios las suplencias NO EXISTEN EN LA REALIDAD
Por lo anterior, considerando que estamos a 13 días del reintegro a clases, por lo que la situación epidemiológica puede no ser la misma, y en el entendido que la medida contempla la posibilidad de revisión en base a la evolución de la situación.
Solicitamos que las autoridades nacionales sopesen nuevamente la decisión, teniendo en cuenta nuestras consideraciones.
Dr. Alejandro Olivera Dr. Ramón Soto
SECRETARIO. PRESIDENTE.