17 de March del 2020 a las 12:34 -
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Falleció Eduardo Luis Piazze, el popular ¨Lalo¨
Se fue el primero de los doloreños: por Freddy Planchón

En la mañana de este martes dejó de existir el actual concejal y ex Presidente de la Junta Local Dolores, Eduardo Luis Piazze.
Tenía 78 años, con una vida dedicada al servicio público, fue Director del Instituto Nacional de Colonización, integrante de la Comisión Administradora del Río Uruguay, edil departamental, así como integrante de diversas organizaciones sociales donde se prodigó con especial energía.
Piazze descendiente de una familia vinculada al comercio náutico por el río San Salvador, fue además un puntal de Sportivo Barracas, institución que en vida le confirió su nombre a su Estadio Deportivo.
Nacido en 1941, Eduardo Luis Piazze Cereghetti fue un hombre que vivió varias vidas al mismo tiempo. Era comerciante, político, dirigente deportivo, comunitario, hombre de familia, pero por sobre todas las cosas era la representación del primer doloreño.
Como comerciante estuvo vinculado al negocio de intermediación de granos, y como dirigente deportivo se destacó por su papel central en Sportivo Barracas institución que lo cuenta entre sus fundadores.
Eduardo "Lalo" o "Lalito" Piazze había jugado previamente como arquero en la tercera División del Club San Salvador, el que por aquel entonces dominaba el Prado, y estuvo en el 61 en la fundación en la institución que lo contó como notable delegado ante la Liga de Fútbol, como Presidente, o como técnico.
Fue precisamente en esa doble condición que alcanzó con Barracas el título de campeón del Litoral en 1988.
Sobre principios de este siglo el Estadio de Barracas, fue bautizado con su nombre.
Lalo, siguió vinculado a Barracas hasta el final. Aún después de haberlo dirigido desde la tribuna chica del Lavalleja primero o desde la cancha cerealera despues, y aún cumpliendo funciones públicas, llevado por la pasión, fue capaz, de someter a los árbitros a duras vindictas verbales, hecho que le valió más de una expulsión.
Las anotaciones de los referís en los formularios con sus expresiones textuales daban lugar a risueños reflejos en la Liga, porque al fin y al cabo, aquellas no eran otras que demostraciones del carácter de un hombre que asumía sus causas integralmente.
En la política, su carrera estuvo signada por ese mismo compromiso con sus convicciones.
En ella su centro no fue la adhesión a una corriente ideológica, dentro del nacionalismo, sino una constante localista a favor de Dolores y los doloreños.
El preámbulo de esa carrera fue su impetuosa militancia gremial estudiantil en el Liceo de Dolores por la década del cincuenta, que el entonces director del Liceo el recordado José Joaquín Barrenechea, procuraba atemperar con un “vení Lalíto”.
En la faz pública Eduardo Luis Piazze empezó a perfilar con nombre propio a partir de su labor como integrante de la Junta Local Dolores en la condición de edil por la minoría blanca entre 1985 y 1990.
Desde allí fustigó en forma permanente a la mayoría colorada, reclamando una gestión con mayor tono autonomista.
La prédica lo convirtió en la figura nacionalista local más importante de entonces y en 1989 integró la fórmula a la Intendencia encabezada por Holf Caresani y que resultó ganadora.
Los votos de Piazze en Dolores fueron sustantivos para alcanzar el gobierno departamental. La peculiaridad de aquel entonces fue el raro cruzamiento los votos departamentales de la 504 con la nacional 904 que dejó a Luis Andriolo en la banca de diputados.
El “Pelau” supo advertir la popularidad de su coterráneo al punto que, para catapultarse a sí mismo, circulaba con cajas en la que tenía por una parte ensobrada su hoja con la de su candidato a Intendente, y por la otra con la fórmula en la que estaba Piazze.
Piazze alcanzaba el triunfo político y uno de los puntos altos de su carrera, un año después del suceso deportivo del 88”.
A mediados de 1990 asumiría como Presidente de la Junta Local.
En el interín durante la espera por el tiempo de conformación de los órganos locales, fruto de las negociaciones políticas, Piazze cruzó espadas con el propio Intendente electo, aún antes de asumir, sospechando que -se le pretendía postergar para facilitar el centralismo mercedario.
Asumió en julio y su período de dos años fue una constante de obras, apoyada por numerosísimas comisiones vecinales que en cada Barrio se sumaron a su gestión.
La estrella rutilante de Eduardo Luis Piazze estaba en su máximo apogeo, al punto a tan solo pocos meses de gestión, los estudiantes del Taruselli en la noche del lunes 15 de octubre desviaron la caravana entierro que venía por Asencio rumbo a su casa. Circuló primero por Sotura y luego en contra por 18 de Julio para que Rossana Ávila Luengo, la flamante reina, le entregase un ramo de flores en reconocimiento a su entusiasta apoyo.
En setiembre del 1991, la afirmación local se expresaba hasta en los símbolos. La Dolores del San Salvador pasó a tener escudo. El mismo escudo que fue estampado en la cancha del Estadio Cerrado el que bajo gestión de Piazze empezó finalmente a ser utilizado para el fin que fue construido treinta años antes.
Con Piazze empezó también la proyección de la construcción del Rosedal de la Rambla, que continúo con Ruben Andriolo y finalizó Luis Bianchi Badano.
El frenesí autonomista de Piazze era acompañado con entusiasmo por los ediles de la Junta Local, al punto que llegaron a analizar junto al diputado Edén Melo Santa María la posibilidad de constituirla en autónoma.
A mediados de 1992 rompería con la 504 constituyendo la Vanguardia Popular Nacionalista con la lista 503, desde la que en 1994 postularía su candidatura a la Intendencia. No logró el triunfo pero fue la figura por lejos más votada en el distrito doloreño reafirmando su condición como la figura política local más importante.
Poco después fue designado Director del Instituto Nacional de Colonización, y luego Director de la Comisión Administradora del Río Uruguay.
En 1999 se postuló a diputado. Fue el blanco más votado pero los nacionalista en aquel entonces se quedaron sin banca.
Con el nuevo sistema electoral en mayo del 2000, pese a las diferencias con Gustavo Lapaz -quién no constituyó las Juntas Locales durante su periodo como Intendentepriorizó su lealtad política blanca, promoviendo la candidatura complementaria de Leopoldo Hirschy Ruiz, con lo que favoreció el triunfo blanco frente a la última postulación de un muy popular Emilio Martino.
El propio Piazze accedió a la Junta Departamental, en la que se mantuvo hasta 2005.
Su estrella parecía apagarse y en 2010 al postularse como candidato al Municipio sumó poco más de trescientos votos, lejos de los miles que tuvo en otra época. Fue superado incluso por su ex secretario Javier Utermark y por quién el mismo impulsó en 1994 como figura política, Fernando Vélez Molina.
Muchos dieron por concluido su tiempo, y empezaban a ponerlo en los libros de historia.
Sorpresivamente en 2015 reaparece, y una oleada de más de mil ciudadanos lo depositan como concejal del Municipio de Dolores, confirmando su vigencia y reafirmando su confianza por su condición de defensor de las cuestiones locales sin desmayos.
En el campo comunitario Eduardo Luis Piazze integró múltiples colectivos ciudadanos. Fue miembro de la Comisión de Fuerzas Vivas, Presidente de la Liga de Defensa Social, y actualmente presidía la Comisión de Usuarios del Hospital de Dolores.
El Hogar Infantil era centro de sus preocupaciones. Solía visitarlo a menudo con obsequios y entretenimientos para los niños allí alojados, y su propia casa, era también un centro de peregrinaje de personas que hacían cola ya sea para pedirle una mano, o solicitarle un consejo.
Con Eduardo Luis Piazze se va el "primus inter pares", el primero de los iguales entre los doloreños.
Poseía una notable capacidad de comunicación a partir de una voz grave y la que al transcurrir transmitía los sentimientos de su corazón.
Con su entusiasmo, los doloreños se entusiasmaban, con sus voces de crítica y reclamo los doloreños se sentían representados en la reivindicación, y en el decir pausado, quienes le escuchaban se llamaban a sosiego, atendiendo siempre la justicia de sus postulados y su razón.
Podrá recordársele por sus obras, por sus conquistas, pero por sobre todas las cosas, por ese permanente entrega, sin miedo, sin cálculos egoístas, a favor de Dolores primero.
El sepelio de Eduardo Luis Piazze tendrá lugar este martes a la hora 17.00 en el Cementerio Municipal.

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