La directora de Inocuidad Alimentaria, Mariela Mauro, detalló que los controles impidieron el paso de 29.000 kilogramos decomisados en 2016 a más de 55.000 en 2019.
La Dirección General de Inocuidad Alimentaria del Ministerio de Ganadería se creó en 2016 con el objetivo de prevenir el ingreso de productos de origen animal o vegetal que pudieran vehiculizar plagas y enfermedades que pongan en riesgo la producción agropecuaria del país y sus mercados de exportación, recordó la titular Mariela Mauro, este miércoles 27 en la presentación de la campaña “La barrera la armamos todos”.
Sostuvo que la meta de la campaña por redes sociales (Facebook, Instagram, Youtube y página web) es generar visibilidad y repercusión sobre los riesgos para disminuir los productos que traen los turistas y los uruguayos que regresan al país que pueden ser nocivos para el buen estatus sanitario que goza Uruguay a nivel internacional.
Mauro desglosó que los registros muestran que de tener un volumen de 29.000 kilogramos decomisados en 2016, se pasó a más de 55.000 en 2019. Detalló que son plantas, semillas, frutas y hortalizas y el resto son productos cárnicos, fiambres, alimentos para mascotas. Dijo que se debe evitar el ingreso de carnes, embutidos, fiambres, frutos del mar, leche, quesos, frutas, plantas, semillas, artesanías en semillas o madera sin barnizar, granos, huesos, astas, entre otros.
En la oportunidad expresó que la dirección a su cargo dispone de convenios con el Ministerio de Defensa mediante el cual militares se integran a los controles de tareas inspectoras en pasos de frontera. En la próxima temporada habrá dos efectivos más por turno en Colonia, Fray Bentos, Paysandú, puerto de Montevideo y Chuy. También tiene convenio con la Dirección de Aduanas para el uso conjunto de tecnología que incluye escáneres y cámaras de videovigilancia.
“Que Uruguay goce del estatus de libre de enfermedades certificadas por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) brinda preferencia en el comercio internacional de carnes y eso debe seguir previniéndose”, destacó el director de Servicios Ganaderos del Ministerio de Ganadería, Eduardo Barre. “Son exigencias que se ponen para que el intercambio cumpla con todas las garantías y así no existan trabas sanitarias”, explicó.
En tanto el director de Servicios Agrícolas, Federico Montes, demostró como el ingreso de una planta con la enfermedad Huanglongbing (HLB), puede afectar gravemente a la producción y exportación citrícola, sin tener consecuencia en los humanos.
(*) fuente Presidencia de la República y MGAP