En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia hacia las Mujeres y de las actividades desarrolladas en la rambla de Mercedes, junto a la plaza de Deportes "Pedro Pasheff" en El Rosedal, uno de los grupos que hicieron uso de la palabra fue el integrado por REMSO y Nuevos Caminos, quienes a través de la periodista y comunicadora Natalia Rodríguez, dio a a conocer la proclamada de la Red Uruguaya contra la Violencia Doméstica y Sexual (RUCVDS) la cual integran las instituciones mencionadas.
En ella la RUCVDS, "reedita sus demandas al Estado de máximo cumplimiento de los derechos de las mujeres uruguayas, en especial los relacionados contra la violencia que se ejerce de muchas maneras contra mujeres y niños, niñas y adolescentes (NNA).
Lo replanteamos año a año, lamentablemente, porque siguen siendo derechos pendientes, muy bien escritos y vigentes en el papel, pero poco y mal aplicados.
Las autoridades actuales y futuras hablan de un necesario “cambio cultural”, pero nadie,
ningún partido, ningún candidato, adelantó una palabra sobre los contenidos de esas frases tan promisorias pero tan vacías de contenido. Los cambios culturales no se operan con menciones oportunistas, se producen a través de cambios, hechos nuevos, que producen nuevas realidades y nuevos mensajes a la sociedad".
La proclama sostiene que las prácticas institucionales "que se aferran a estilos históricos y valores obsoletos, incumplen sus obligaciones y son componente principal del no cambio cultural.
Confirman los prejuicios, aseguran que todo siga como está, haciendo lo que siempre se hizo, aun contradiciendo leyes nacionales y convenciones internacionales.
Un ejemplo es el Poder Judicial donde año a año se repiten actuaciones inaceptables que perjudican los derechos de mujeres y NNA. Las denuncias de maltrato y abuso sexual a NNA aumentan cada año mientras el Poder Judicial insiste en desvalorizar los testimonios en función de sus valores y creencias personales, y muchas veces interpreta arbitrariamente, sin pruebas objetivas, que han sido manipulados por sus madres. O que las mujeres mienten e inventan denuncias para perjudicar a su pareja".
Añade que también "son más visibles las situaciones de acoso y abuso sexual laboral, así como las respuestas mínimas e inadecuadas a las denuncias, que confirman la desprotección de las mujeres.
En consecuencia reiteramos la exigencia de recursos para:
Lograr la plena aplicación de la ley 19580, adecuación de los servicios del Poder Judicial a las necesidades y capacitación permanente para actualizar la gestión de los jueces, defensores y fiscales e integrar la perspectiva de género en las prácticas judiciales, así como Defensoría Pública efectiva a mujeres y NNA, que asesore y apoye adecuadamente en cada caso.
Reforzar el Sistema de Respuesta a la Violencia de Género de modo que Inmujeres pueda trabajar con las víctimas con la frecuencia adecuada a cada caso.
Cubrir las necesidades de INAU para atender a pleno el maltrato, la explotación sexual comercial el abuso sexual infantil-adolescentes, que habilite una vida libre de violencia a los NNA a su cargo.
Intensificar las actividades tendientes a sancionar y erradicar la trata de personas
en todo el país.
Enfrentar el acoso laboral y el acoso sexual a las mujeres en los espacios de trabajo.
Efectivizar la coordinación del Poder Judicial, Ministerio del Interior y Fiscalía para intervenir con perspectiva de género en forma conjunta, coordinada y oportuna; sumando esfuerzos.
Que el Poder Judicial asuma a cabalidad la legislación que rige en nuestro país, y por lo tanto, se entere que debe analizar las situaciones de violencia y abuso contra mujeres y NNA con perspectiva de género para erradicar sentencias absurdas y al margen de la realidad.
¡Exigimos la plena aplicación de la Ley 19580 vigente!", concluye la proclama.