Seguridad a partir del incremento de los delitos y de la cantidad de los presos, su relación con las políticas sociales y educativas, fue otro de los temas abordados en el mano a mano de @gesor con el periodista Gerardo Sotelo, actualmente dedicado a la actividad política integrando el Partido Independiente, por lo que dejó de lado momentáneamente su profesión, y que este jueves estuvo en Mercedes siendo recibido por el primer suplente a la Diputaciòn por el PI Soriano, Federico Prado. Así respondió Sotelo a las preguntas realizadas por @gesor.
Cuando el Frente Amplio llegó al Gobierno recordamos al Ministro del Interior, José Díaz diciendo "vamos a cerrar cárceles y abrir escuelas, vamos a bajar la cantidad de presos", hoy sin embargo hacen más cárceles y festejan que se superó la cantidad de presos del Código del Proceso anterior, ¡qué falló? Por otro lado desde el FA saltan enseguida contrarios a la mano dura cuando se habla de ello, pero cuando vemos actuar a Leal con sus fuerzas de choques, se ve la mano dura a pleno, ¿cómo debería actuarse?
"Lo que pasa que entre medio de la ilusión que tenía Díaz, que era una ilusión que podíamos compartir muchos y este resultado, lo que fracasaron fueron las políticas. No se puede abordar el tema de seguridad o del delito solamente desde la perspectiva represiva, ese es el error del discurso de Manini, de Novick, pero también de Vivir sin Miedo...".
¿Y no del Frente que ha estado 15 años sin poder solucionarlo?
"Yo no espero que el Frente lo solucione a esta altura. El Frente lo intentó, no le podemos reprochar que no lo intentó, lo que pasa es que fracasó. El Frente reestructuró las comisarías en Montevideo, eso había que hacerlo, lo que pasa es que tiró al bebé con el agua de la tina, porque la gente siente que la Policía no está más en los barrios. El Frente profesionalizó, armó, tecnificó a la Policía, aumentó los salarios, incorporó más policías, eso había que hacerlo, el problema es que el resultado es espantoso. Y el fracaso no es solo de las políticas represivas, si llegamos a necesitar políticas represivas es porque fracasamos antes en otro lado. Fijate que en 15 años de crecimiento tenés que prácticamente se cuadruplicó la cantidad de presos, ¿eso que quiere decir? Que tenemos cuatro veces más delincuentes, fabricamos delincuentes con crecimiento más que en época de crisis. Lo que fracasaron ahí fueron las políticas sociales y las políticas educativas. Es clarísimo, porque los delincuentes son nueve y medio de cada diez, abrumadoramente son hombres, jóvenes y muy pobres, llegamos tarde. Ahí tenés que reformar las políticas sociales para focalizarlas aun más en la familia y en la primera infancia y en todo caso la familia en el territorio, en el barrio, el vínculo con la escuela, con las actividades barriales, con la comunidad. El sistema educativo para que permita que no fracasen 8 de cada 10 jóvenes pobres, que abandonan el primer ciclo de Secundaria, por lo tanto van a seguir siendo pobres, igual o más. ¿Esos jóvenes dónde están? Los que no están trabajando por un salario muy bajo, con poco futuro, allí están los delincuentes, son esos jóvenes. Entonces tenés políticas represivas, políticas sociales y educativas en su dimensión social y productiva y la política de cárcel. Tenemos un nivel de reincidencia del 60%, 6 de cada 10 presos que están hoy van a volver a delinquir, 6.000 a 6.500 personas que hoy están presas, van a salir algún día de nuevo a delinquir. Cuando hay otros países de desarrollo medio, quizás un poquito mejor que Uruguay, tienen tasa de reincidencia que están en la mitad por lo menos, y eso es el fracaso de las políticas de cárceles. Habrá que hacer cárceles más pequeñas, darle más oportunidades, no puede decir Manini que la solución es hacer trabajar a los presos, porque es un problema que no existe, los presos que le dan la oportunidad, trabajan, el problema es que tenemos más presos que oportunidades de trabajo, no es que los presos no quieran trabajar. El sistema carcelario no está diseñado ni tiene probablemente el financiamiento, ni la especialización técnica, a la dimensión del problema que tenemos".
Cuando decís que fracason las políticas sociales, sin embargo Marina Arismendi dice que se va con el deber cumplido...
"Noooo!!! Qué se va a ir con el deber cumplido!!! Como se va a ir con el deber cumplido si lo vemos que se expresa en la cantidad de delincuentes, que aumenta la cantidad de personas que viven en asentamientos irregulares. Claro hoy tenés que una persona que hace veinte años vivía en un asentamiento, quizás pasara frío y tuviera que irse caminando al trabajo, hoy puede hasta tener aire acondicionado en el rancho de madera, porque el aire acondicionado sale muy barato y está colgada de la luz. Toda la sociedad uruguaya está un poco mejor y los más pobres también, lo que no tienen es la chance de salir de la pobreza, porque las políticas sociales que diseñó Marina Arismendi y el Frente Amplio, no tenían como objetivo que la gente encontrara lo que se llama una ruta de salida, finalmente el resultado nos dice que los que sospechamos que eran asistencialistas, efectivamente lo eran. Esa es la diferencia con propuestas como por ejemplo la del Partido Independiente que dice, por supuesto que tiene que hacer políticas sociales, no es que gastamos mucho, quizá gastamos poco, pero tienen que ser promocionales, tenés que darle a la gente...".
¿Una contrapartida?
"Sí, todavía desde la cúpula del Ministerio se discute, se niega la importancia y la pertinencia de exigirle contrapartida. ¿Cómo no vas a exigirle contrapartida a la gente? Exigirle contrapartida a la gente es -como se dice ahora- empoderarla, decirle, "usted puede generar contrapartidas porque puede hacer cosas por usted y por los que pusieron la plata para que usted pueda salir adelante". Es exactamente al revés, es dignificante. Es una persona capa de generar lo que a usted se le da. Eso transparenta que esa persona tiene derecho a recibir ese dinero, pero que ese dinero lo puso alguien, y lo puso otro laburante que quizá esté en mejor condición. Pero a la vez le decís a la gente que es capaz de hacer algo por el prójimo, esa es la contrapartida. Ayudás a cortar el círculo vicioso de la marginación y la dependencia, porque la contrapartida tiene que ver con que los hijos vayan a la escuela, al dentista, al médico, al liceo, esas son las contrapartidas. Como decía Perón, no hay más verdad que la realidad, si vos terminás un ciclo histórico de 15 años de crecimiento histórico y tenés tres veces más delincuentes, no hablemos cuántas veces más de rapiñas, homicidios, tenés más gente viviendo en asentamientos irregulares, claro que hay mejores servicios que hace 15 años en ellos. Hay planes CAIF, escuelas, policlínicas, eso está bien, pero se ha cronificado la marginación, eso es inaceptable".