(Por Enrique Lécaille) El sábado 26 de diciembre de 1998 el nombre de Ricardo Olivera pasó a formar parte de la historia del fútbol mundial, cuando anotó para la selección de Río Negro Capital el gol más rápido del planeta, en el parque “Ariel” de la localidad de José Enrique Rodó, en el centro del departamento, cuando sólo habían transcurrido 2,8 segundos.
Aquel partido ante Soriano Interior terminó empatado a uno, pero desde luego el resultado fue lo menos relevante, porque todos esa noche se quedaron comentando el tempranero gol de Olivera, que después sería reconocido por la propia FIFA como el más rápido de todos.
Al otro día, comenzaron a llamarlo los medios masivos de comunicación de todas partes del mundo, como era de esperar. Su nombre ya había trascendido fronteras y sin querer había puesto a José Enrique Rodó y a todo el departamento de Soriano en los primeros planos de la información deportiva internacional.
Dedicado actualmente a la dirección técnica del equipo sub-15 de Anglo de Fray Bentos, Ricardo Raúl Olivera Puyol estuvo el pasado fin de sema en el Estadio Luis Koster de Mercedes, donde sus dirigidos enfrentaron a Bristol, en el preliminar del partido semifinal disputado entre las selecciones de Mercedes y Tacuarembó por la Copa nacional de la Organización de Fútbol del Interior (OFI).
Tratándose de una instancia decisiva del fútbol del Interior, Olivera no podía dejar de recordar aquella imborrable noche de diciembre de 1998, cuando en el mundo entero se habló de su conquista.
“En estos momentos estoy viendo cuando los muchachos me decían que el golero estaba adelantado”, nos dijo al evocar su gol, como si estuviera todavía en el Parque Ariel.
“Le pegué como nunca antes le había pegado y la pelota ingresó justa, sin sobrarle nada, sobre el arco de Martín Correa”, recordó para la Agencia Soriano de Noticias, admitiendo que con el paso del tiempo su tanto ha logrado para él una dimensión que antes no le otorgaba.
“Fue algo chico para el mundo, pero grande para nosotros”.
Aunque es oriundo de Sacachispas, en el noreste de Soriano, y aunque está radicado en la ciudad de Fray Bentos junto a su esposa rionegrense y sus dos hijos, Olivera, le manifestó @gesor su beneplácito por el buen momento del seleccionado mercedario, que está clasificado para disputar las finales del certamen de la OFI ante Melo.
“Me alegro mucho por Sasén, a quien estimo mucho”, indicó.
“Acá ha habido buenos técnicos, pero sin dudas Sasén sabe transmitir muy bien su idea futbolística y eso se nota, porque sus equipos siempre están definiendo”.
"Cuando me enteré que lo habían designado para dirigir otra vez a Mercedes, yo me alegré mucho y por fortuna se le han dado los resultados, para bien de él y de todo el fútbol de Soriano", agregó.
Foto: Eloísa Font