Finalmente la Cooperativa de Viviendas de Dolores (COVIDOL) luego de años de lucha por la búsqueda de terrenos para poder construir su complejo habitacional, un debe que el Gobierno Departamental venía arrastrando desde hace mucho tiempo y que no podía concretarse porque los predios que se conseguían no contaban con los servicios exigidos por el MVOTMA para otorgar posteriormente el préstamo para la construcción y así se fue postergando, como también hubo otras dificultades en diferentes ocasiones, hasta que ahora se logra concretar el acuerdo y a través del convenio que la Intendencia de Soriano tiene con FUCVAM, COVIDOL puede acceder al tan anhelado terreno que le permitió presentar su proyecto y participar del primer sorteo de préstamos realizado recientemente en Montevideo.
Para ello también hubo en las últimas horas la intervención de la Junta Departamental de Soriano, otorgando la anuencia correspondiente a la Intendencia de Soriano para adquirir dos padres urbanos de Dolores, 3907 y 5840 una vez cumplidos los requerimientos de la Ley de Ordenamiento Territorial y concordantes.
la Comisión de Legislación y Peticiones de la Junta Departamental en uno de los considerandos reconoce que "es la Política de Vivienda uno de los ejes fundamentales de la actual administración, reconociendo el valor fundamental para el desarrollo de las familias en particular y de la sociedad toda en general".
En esa línea se otorgó la anuencia para la adquisición del padrón 6797 que por valor catastral costaba US$ 249.600 pero por acuerdo previo la comuna terminará pagando US$ 230.400, mientras que el padrón 6804 cuyo valor catastral es de US$ 102.543 lo pagará US$ 80.955, totalizando entre ambos entonces US$ 311.355. Los terrenos serán destinados a la Cartera de Tierras y a través de FUCVAM ya se acordó que el destino será el de COVIDOL. Recordamos que esto funciona como un fondo rotatorio y que cuando COVIDOL salga sorteada con su prèstamo o le sea otorgado en forma directa después de tres sorteos sin salir favorecida, al recibir el préstamo, devuelve el valor del terreno, el que se reintegra a la Cartera de Tierras y con ello se adquieren nuevos predios para otorgar a otras cooperativas, como ha venido sucediendo desde hace algunos años en las Administraciones de Besozzi y Bascou.