(Por Enrique Lécaille) Las semifinales quedaron atrás. Mercedes deberá ahora prepararse para enfrentar a Melo en las finales de la Copa nacional de la Organización de Fútbol del Interior (OFI).
En este largo proceso para llegar a la definición del certamen, el plantel que dirige técnicamente Hugo Sasén debió superar en la primera fase a Fray Bentos, Young y Soriano Interior (representado por Nueva Palmira). Posteriormente dejó en el camino a Flores, Colonia del Sacramento (último monarca de la OFI) y por último a Tacuarembó.
Pero además de sus adversarios de turno, Mercedes debió sortear varias dificultades que se presentaron en el camino, como la lesión de Diego Pérez (que estaba atravesando un gran momento cuando se lesionó) o la suspensión de su golero titular y capitán, Enrique Moreira, quien fuera muy bien suplantado por José Luis Manzanares, convertido en héroe al atajar en Colonia un penal decisivo sancionado en tiempo adicional.
Sasén, con toda su sapiencia de viejo conocedor del fútbol del Interior, fue logrando amalgamar un buen grupo, tal vez sin jugadores desequilibrantes, pero un conjunto convencido de la idea futbolística que le transmitiera su entrenador, a pesar de las lesiones y suspensiones que fueron desdibujando al equipo en algunos encuentros.
Un hecho sin dudas a destacar es la unión del grupo y fundamentalmente la firme disposición de todos sus integrantes, incluso la de aquellos que por distintas circunstancias no han tenido continuidad, el caso del ya mencionado Diego Pérez o de Mauricio Simaldoni, quien resultara lesionado debido a un accidente de tránsito sufrido luego del partido con Flores, pero que en ningún momento dejó de apoyar a sus compañeros (lo vimos en el estadio asistiendo con su cuello ortopédico).
No menos valiosa ha sido la actitud de John Salvador, quien al comenzar este proceso se encontraba lesionado (se había sentido hacia el final del Torneo Clausura) y quien estuvo varios partidos al margen, sin poder ser tenido en cuenta por Sasén, pero que supo esperar su oportunidad.
Todo este tipo de actitudes han ayudado a cimentar a una selección en la que quizás no había muchas esperanzas por parte de los aficionados en general, y sobre todo después de una ausencia de dos años del fútbol mercedario en la Copa nacional.
Faltan las finales, es cierto. Nos queda la ilusión de ver a Mercedes coronarse campeón, pero al margen de lo que pueda suceder en las finales contra el elenco arachán, lo que ha logrado esta selección de Mercedes no debe perderse de vista. Para quienes hemos estado junto a la selección, en la cobertura diaria de sus entrenamientos para @gesor, creemos que es digno de ser destacado.
Foto: Eloísa Font